Vaya por delante: Este escrito tiene fecha de caducidad, o, al menos, así me gustaría. Como dijo Mickey Mantle “Es increíble todo lo que no sabes sobre el juego al que has estado jugando durante toda la vida”.
Imaginad a un prospecto cualquiera, drafteado hace mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana. Lleva años añadiendo A’s a su curriculum, perdiendo alguna letra por el camino y volviéndola a recuperar cuando un día recibe una llamada que le dice que es el momento de saltar a la Gran Carpa. No hay ninguna cámara de por medio, pero la ilusión de esa persona es enorme.
Llevado por la euforia del momento osa preguntar por un número para lucir en su camiseta. “Chico, primero espera a tener la oportunidad de salir y luego ya veremos qué número tenemos disponible para ti. Ese que quieres está retirado por el hijo del conserje del Dogout”.
Un día, durante el final de novena entrada y ganando su equipo 18-0 el Manager le manda enfrentarse al Segunda Base rival que ahora hace las veces de cerrador. El chico con las prisas agarra el bate equivocado, pero ¡qué demonios! ¡Seguro que el destino lo ha querido así! Deja pasar un par de bolas que el Umpire decide que son Strike pero al tercer lanzamiento opta por hacer uso de su instinto y golpea lo que no se sabe si es una curva o una fastball que cae por su poca velocidad. La pelota aterriza en el césped entre primera y segunda mientras corre como alma que lleva el diablo para lograr su primer hit/extrabase.
Su sueño se ha hecho realidad pero este queda un tanto diluido cuando ve que un malcarado primera base que recibió SU bola en un intento frustrado de relevo la lanza al público con desdén. “Está tranquilo, chico” le dice su Coach. “Seguro que es el primero de muchos y ya recibirás tu bola de recuerdo”.
Deciden premiar su doble dejándole enfrentarse a un lanzador titular al día siguiente. Logra embasarse con un Rolling ya que el Short Stop decide que es más peligroso el compañero que avanzaba a mitad de camino de la tierra prometida de Home. Al día siguiente tiene otra oportunidad y ahí sí que nadie puede discutirle un hit salvo el enfadado Manager rival que reclama revisión de su llegada sin éxito.
Tres partidos y 2 errores defensivos más tarde le dan una palmadita en la espalda y le mandan a su zona de confort en Triple A “por bajo desempeño”. Queda esperando una llamada que no vuelve a producirse y pocos años después decide que su sueño terminó.
Temporada 2024. Otro prospecto recibe la indicación de pasar por la oficina del jefe. Todo el mundo le mira en su camino hacia el cuartito. Es el número 1 del Draft y ascendió cual globo aerostático dopado de Helio en poco más de una temporada, así que todos le saludan con condescendencia mientras se dirige a su destino.
Ahí sí que hay cámara preparada, situada con la idea de estar ahí de manera accidental ya que hay que subir imágenes a redes sociales. Todo es emotivo, claro, y además se le comunica que han hablado con uno de esos jugadores que tiene un récord imbatible y que este le cede su dorsal. Por supuesto los detalles de la llamada también quedan bien documentados.
Llega la hora del Debut contra mis siempre impredecibles (casi siempre para mal…) Red Sox. MLB.TV ya ha hecho secciones especiales para sus predecibles grandes momentos del encuentro. Hay cámaras que solo le enfocan a él y público con su camiseta que parece haberse hecho la cirugía para asemejarse a la Estrella, porque así se le trata ya. El público mira hacia arriba esperando que una formación de cazas de combate trace en el cielo de Boston el dibujo de los rizos de la Estrella. Todo el mundo está dispuesto para deleitarse con la visión de un fenómeno imparable que se llama Jackson Holliday.
Su equipo hace el trabajo y vencen a los locales que dejan escapar una ventaja inicial de 5 carreras. Sí… cierto… igual el meteorito que iba a demoler Fenway pasó un poco de rasquis pero los titulares son claros destacando la primera carrera impulsada del jovencito gracias a un Rolling fácil de atrapar pero lo suficientemente eficaz como para que nadie pudiese ni intentar parar al jugador que esperaba en tercera.
¡Por supuesto hay nuevas oportunidades y que el Hype no decaiga! Durante las 2 siguientes jornadas el videojuego insignia MLB The Show lanza la carta especial super charged con Holliday, que sigue a la espera de dar el gran bombazo. Hay muchas declaraciones infladas y, bajo mi punto de vista, de las pocas sinceras son las del joven jugador ante la emoción de debutar en un escenario histórico. En 2 partidos más hace una buena demostración de su agilidad y buen guante, pero las ganas de swing le pueden y no logra volver a recorrer con éxito esos mágicos 90 pies salvo en un error (otro) de la defensa de Boston.
La mañana de la redacción de la mayor parte de este escrito (14/04/2024) me despierto intranquilo con la firme intención de hablar sobre EL PROSPECTO y esperando de verdad que al ver el resumen de hoy tenga que sacar nuevo tema para el artículo al haber Holliday hecho el partido que nos han estado contando que iba a hacer. Me he encontrado que no ha jugado e ignoro el porqué, pero no me ha gustado.
Finalmente parece que los focos, las cámaras, los fans “disfrazados”… se han tomado un descanso y el debut de Jackson queda a fecha de hoy (22/04/24) en 50 turnos al bate, 4 carreras, 1 carrera impulsada, y un promedio de 0.33.
Ok, que nadie se confunda. Esto no es un texto para reírme de Holliday y de su desempeño. ¡El chico me cae muy bien! ¡Su equipo me cae muy bien! ¡Si hasta parece haber pasado por el asesor de imagen de Henderson, Rutschman y compañía! Está claro que su puesto en el draft, y la decisión (precipitada en mi opinión) para debutar en MLB no son un regalo, pero todos me habían hecho creer que los ya lejanos debuts de Triston Casas, Anthony Volpe, Jasson Dominguez, Elly De La Cruz, con prestaciones muy destacables, con esa hambre que solo tienen los más jóvenes, iban a quedar eclipsados por el bueno de Jackson.
Creo que toda la parafernalia que se montó para el debut de Holliday era un tanto excesiva. Es normal que Baltimore quiera sacar a relucir el brillo de su nueva arma secreta pero… He tenido la sensación de que nos querían decir “¡Eh! ¡No necesitáis un nuevo Héroe, pero aquí tenéis a otro!” Como si más que un súper héroe MLB se hubiese propuesto montar su universo tipo Marvel en el que un chico del 2003 tuviese un nuevo súper poder con el que preocupar a los Harper, Trout, Ohtani, Turner, Betts… de turno.
Me cansa tanta Liga Fantástica en el mundo real. Creo que los jugadores ya se lo trabajan suficiente día a día haciendo cosas increíbles, desde el jugador más renombrado a aquel que está haciendo las maletas para su retorno a Ligas Menores. Ya brillan suficiente con luz propia como para quemarlos con los focos…
Ojalá en nada este sea un texto por revisar, obsoleto por los tremendos números de Holliday que solo él se habrá trabajado a base de madera, piel, tierra batida, algo de césped y velocidad. ¡Suerte, Jackson!