Hoy toca hablar de la División Central de la liga americana, una división que comenzó con un control absoluto y sorprendente de los Royals pero que, desgraciadamente para sus seguidores, ha sido flor de un espectacular comienzo y no ha podido ser sostenido en el tiempo.
Si a primeros de año les dices a cualquier analista del béisbol norteamericano que los White Sox iban a perder, para casi toda la temporada, a jugadores como Eloy Jimenez, Luis Robert o Nick Madrigal, dirías que los Twins iban a ganar la división de forma clara. Pues a mitad de temporada, y con todos esos inconvenientes en la franquicia de Chicago, no sólo lideran sino que cuentan con un colchón de 6 partidos sobre los Indians. El comienzo de Yermin Mercedes fue histórico aunque ha bajado bastante en los últimos partidos siendo bajado incluso a Triple A y son los Yoan Moncada, el atemporal Tim Anderson y el vigente MVP Jose Abreu quienes están sosteniendo el ataque de forma meritoria. Yasmani Grandal oculta tras un promedio lastimoso (.190) un buen OBP (.388) y un buen slugging (.441). Y es que tiene una pacienca asombrosa que le da muchas bases por bolas. Una lesión en la rodilla le apartará por bastante tiempo. Pero es desde la defensa donde se está cimentando ese dominio. Sextos en ERA de toda la MLB, la rotación está dominando con actuaciones estelares de Lance Lynn (2.02 de ERA, quinto de la liga), Carlos Rodon (2.37, undécimo) y su no hitter, Dylan Cease y esperando mejor rendimiento de Lucas Giolito, ace del equipo, y del veterano Dallas Keuchel. Si los Jimenez, Madrigal y Robert se recuperan, miedo me dan los White Sox. Quizá no vendría mal algún refuerzo en el bullpen pero Liam Hendriks, uno de sus fichajes estrella, está bastante correcto con 21 salvamentos en 24 oportunidades. Si pudiera votar por una final en la liga americana, votaría por un Astros-White Sox si la enfermería se vacía en la ciudad del viento.
Segundos están unos Indians con los que nadie contaba después de un pequeño desmantelamiento en invierno, pero los siempre fiables lanzadores de los Indians siempre permiten al equipo tener opciones de victoria. Shane Bieber, Aaron Civale y Zach Plesac son un buen trío aunque están faltando brazos que les secunden. Triston McKenzie o Logan Allen, por poner ejemplos, tienen ERAs muy altos. En el bullpen, quizá está el dueto joven mejor de la liga. James Karinchak sigue eliminando por SO a un ratio top en la liga (62 en 36 entradas) y Emmanuel Clase, tras su suspensión, empieza a dar crédito a quienes traspasaron por él dando a Corey Kluber. 1.01 de ERA se gasta Clase tras aparecer en 36 partidos. El tandem cerrador tiene 20 saves en 22 oportunidades. En ataque, salvo en poder, los Indians están bastante abajo en casi todas las estadísticas. Jose Ramirez es, otro año más, el arma más letal del equipo dando 18 Hrs, y eso que siempre le cuesta arrancar. Los fichajes de Cesar Hernandez y Eddie Rosario han sido efectivos y están teniendo aportaciones nada esperadas de jugadores como Harold Ramirez o Josh Naylor, éste último hasta su terrible lesión. La caída en desgracia del receptor Roberto Perez sigue su curso, incapaz de batear ninguna bola. En resumen, temporada muy meritoria pero que me temo que no les va a valer para llegar a play offs.
Los Tigers, tras una temporada discreta, se han situado terceros con buenas noticias… y otras no tan buenas. Las primeras las monopolizan los abridores con dos de sus mejores prospectos empezando a dar señales de que su hype era merecido. Casey Mize comienza a ser aquel lanzador que le valió el número uno del draft de 2018 (ERA de 3.55) tras un comienzo muy dubitativo como profesional. Tarik Skubal lleva un ERA más discreto (4.35) pero cuenta con un prometedor ratio de SO de 100 en 82 entradas. Y Spencer Turnbull hizo un no hitter ante los Mariners y es el ace del equipo por rendimiento. Y por último, Matthew Boyd estaba en todas las quinielas para ser traspasado este mismo año. Pero las lesiones han podio tanto con Turnbull como con Boyd ya ambos son baja, mínimo, hasta después del All Star. Sin embargo, el bullpen está desastroso. Apenas buenas aportaciones de Gregory Soto (All Star representando a los de Michigan) o Jose Cisnero. En ataque, no se ven los mismos brotes y ahí es donde A.J. Hinch tendrá que ser creativo en el futuro. Jonathan Schoop es el bate más peligroso del equipo y Akil Badoo es la sorpresa, mientras los highlights se los lleva Miguel Cabrera intentando superar milestones. Wilson Ramos ha sido incluso cortado cuando hace pocos años era de los mejores catchers ofensivos. Pero el sorprendente Eric Haase le ha comido la tostada. Robbie Grossman ha sido un buen fichaje pero faltan muchas cosas en ataque para competir para entrar en playoffs.
Los Royals, tras un comienzo espectacular, se han desmoronado de una forma palpable y están cerca de ser los últimos de su división tras haberla liderado en Mayo. Una caída en desgracia sin precedentes. Y es que nada está funcionando en Kansas últimamente. Los Royals han caído en ERA hasta por encima de 5.00 y la reedición de aquel bullpen que tanto les daría en 2015 (Greg Holland o Wade Davis) es un fracaso absoluto. Salvador Perez es la única buena noticia de la franquicia siendo, de largo, el mejor receptor de la liga al bate. Pero es que el montículo es un solar. Apenas Danny Duffy está poniendo números digno de la MLB. Sí que los Royals tienen algo a lo que agarrarse en ataque, con el poder de Carlos Santana, el aparente renacimiento de Andrew Benintendi o la siempre correcta contribución de Whit Merrifield pero la salud de cristal de Adalberto Mondesi se está notando en demasía. Apenas 10 partidos ha jugado uno de los estandartes de los Royals. Caída libre dura ante unos aficionados que se las prometían felices a comienzos de campaña.
Y, por último, colistas de la división, la mayor sorpresa, negativa, obviamente, de la liga. Los Twins, llamados a luchar con los White Sox por ganar la división, se encuentran a 15 partidos y parecen dispuestos a protagonizar el mercado de traspasos, poniendo en el mercado hasta al entrenador. Y seguramente serán los bates los traspasados porque, por lo menos, son los que están aportando algo. Las lesiones de un estelar Byron Buxton ha hecho mucho daño cuando parecía, por fin, llegar a donde se preveía desde hace tiempo. Y Nelson Cruz, uno de los principales en las quinielas, sigue demostrando que el tiempo no pasa para él y Josh Donaldson, cuando está sano, también es un jugador interesante. En el montículo, los Twins llevan el cuarto peor ERA de la liga tras los peores equipos de la MLB, Orioles y D’Backs, y los Angels, equipo siempre interesado en reforzar antes el equipo de aguadores que el de lanzadores. Kenta Maeda es el reflejo del equipo. De luchar por el Cy Young el año pasado a ser un terrible abridor con un ERA de 5.56. Happ supera el 6.00 y el de Shoemaker o Dobnak roza la vergüenza. Veremos qué sacan los Twins en este agitado, parece, mercado.
MVP: Byron Buxton (Twins), a pesar de las lesiones
Cy Young: Lance Lynn (White Sox)
Rookie del año: Casey Mize (Detroit Tigers)
Entrenador del año: Tony LaRussa (Chicago White Sox)