Los Chicago White Sox, concluyeron una campaña en negativo, donde las pocas notas a destacar fueron la inclusión en el equipo de algunos jóvenes talentos, con Yoan Moncada como máximo exponente, y la explosión de jugadores que deben erigirse claves para el resurgir de la franquicia de Illionis.
A pesar de un balance bastante lejano a las .500 victorias, pues los chicos de Rick Rentería acabaron la campaña con marca 67-95, poco se puede objetar de un curso claramente dedicado a la reconstrucción del equipo.
El equipo perdió piezas claves antes de iniciar la temporada y durante el devenir de la misma, jugadores como José Quintana, quien recaló en los Cubs, David Robertson, Tommy Kahnle y Todd Frazier, quienes fueron enviados a los Yankees, o Melky Cabrera, quien se vio obligado a hacer las maletas para aterrizar en Kansas City. Estos son algunos de los veteranos nombres que los White Sox intercambiaron durante el año. Todo esto sumado a la marcha en invierno de Chris Sale, jugador que ha bordado una gran temporada en los Red Sox, siendo uno de los máximos aspirantes al premio Cy Young de la Liga Americana.
Visto desde esta perspectiva, todavía sorprende que los White Sox siquiera hayan podido competir durante este 2017.
Pero… ¿qué obtuvieron a cambio los Chicago White Sox?
Esencialmente mucho talento joven. Pues parece que, probablemente, ese fuera el único filtro que requerían los dirigentes de Chicago antes de sentarse a hablar con posibles equipos interesados en sus jugadores.
Según los rankings de Baseball America, tres de los veinticinco mejores prospectos de la MLB, pertenecen a los White Sox y son fruto de intercambios transcurridos en este 2017. Hablamos del 2B Yoan Moncada (prospecto número uno de las Grandes Ligas), el OF Eloy Jiménez (quinto mejor prospecto de la MLB) y del RHP Michael Kopech (veinte mejor prospecto según el mismo ranking).
De todos ellos, cabe decir que el cubano Yoan Moncada, de 22 años, es quien más impacto ha tenido durante el transcurso del año 2017, apareciendo hasta en 54 ocasiones y promediando unos números (.229/.331./399) que dejan una interesante estela de lo que puede estar por venir en años próximos.
No obstante, existen más jóvenes talentos que siguen desarrollando para dar el gran salto. Hablamos de jugadores como el RHP Carson Fulmer, quién tuvo apariciones destacables en el montículo durante el mes de Setiembre, o el LHP Aaron Bummer, quien también apareció este año como relevista en una treintena de ocasiones.
¿Qué otros nombres destacaron en el 2017 en los Chicago White Sox?
Sin duda alguna, uno de los nombres clave, si no el que más. El venezolano al fin dio muestras claras de su talento durante el curso 2017, consiguiendo incluso la aparición para el juego de estrellas disputado en Miami. Sus números fueron muy sólidos, bateando por .330, y rindiendo a gran nivel defensivo en el jardín derecho.
Aunque parece poco probable, algunos rumores apuntan a que el jugador de 26 años podría ser traspasado durante este invierno, para seguir trayendo todavía más talento joven al equipo, algo que, por otro lado, parece innecesario dado los grandes prospectos que ya hay desarrollándose en el sistema de granjas.
· José Abreu:
Por cuarta temporada consecutiva, el cubano mostró un gran poderío con el bate y guió la ofensiva de los White Sox durante gran parte de la temporada, alcanzando una cifra total de 33HR y 102RBI. Abreu, de 30 años, se enfila a su quinta campaña como media blanca.
Fuentes internas hablan de una gran conexión con el también cubano Yoan Moncada, a quien parece ser que el 1B estaría tutorizando de algún modo. Sin embargo, existen rumores que apuntan a que también podría ser objeto de intercambio si los White Sox decidiesen seguir con su política de renovación de roster. Su permanencia parece más probable que la de Avisaíl García.
· Tim Anderson:
El joven SS de 24 años, se puede considerar uno de los nombres propios de la temporada, aunque en menor relevancia que los dos anteriores. Su temporada fue claramente de menos a más, debido a los problemas personales que le afectaron a principio de año.
Anderson, quien bateó por .327 durante el mes de Setiembre, alcanzó un acuerdo para firmar un contrato de 5 temporadas y 25M$, más dos opciones de club que le llevarían a superar los 50M$ en 7 años. Deberá rendir mejor en defensa, pues si algo ha demostrado este año, es debilidad con el guante.
¿Y que tal por el montículo de los Chicago White Sox?
La rotación de abridores lució muy modestamente durante este 2017, y buena parte de ello, se debe a la actuación de James Shields, el veterano as fue el termómetro del equipo en la lomita, y finalizó la temporada con un ERA de 5.23 (5W-7L).
La próxima campaña volverá a alcanzar los 21M$ de contrato, sin grandes esperanzas de que luzca dígitos en positivo, después de dos campañas en claro declive.
A pesar de que los Chicago White Sox se vieron un poco huérfanos en el pitcheo, cabe decir que Carlos Rodón, una de las grandes esperanzas del momento, solo pudo competir durante 2 meses debido a diversas lesiones y molestias en el brazo izquierdo. Si el 2018 se presenta saludable, puede ser una de las revelaciones del equipo.
El otro punto de la balanza lo ocupan Lucas Giolito y Reynaldo López, ambos de 23 años, quienes deben seguir creciendo a lo largo de la próxima campaña, para construir una rotación que, con las posibles integraciones definitivas de Carlson y Bummer, podría lucir imponente en el largo plazo.
Por último, el bullpen merece mención a parte. A mi juicio personal, este debería ser el primer aspecto a reforzar durante el invierno, y además debería ser tratado con relativa urgencia. La temporada ha sido desastrosa en la rotación y ningún jugador se ha afianzado demostrando buen rendimiento y regularidad.
El año 1 de la profunda reestructuración de los White Sox ha finalizado con más satisfacción en lo individual que en lo colectivo. Algunos peloteros lucieron un buen rendimiento, aunque en la defensiva, al igual que en el ya mencionado pitcheo, dejaron mucho que desear.
El equipo sacrificó talento por grandes nombres a los que habrá que seguir de cerca en este 2018. Si echamos la vista atrás, entre los años 2011 y 2014, los Houston Astros obtuvieron una media de 104 derrotas por temporada, para acabar siendo campeones de las World Series hace escasos días… Con el foco puesto en los próximos años, ¿quien nos dice que los Chicago White Sox no pueden llegar a ser un equipo claramente ganador?
