Casi sin inmutarnos y envueltos en la vorágine de partidos que conlleva la temporada regular de la MLB, hemos llegado al ecuador de la temporada, época del año que lo marca el All Star Game, y donde equipos ya condenados a tirar la temporada se enfrascan en movimientos donde intentar sacar provecho, mediante traspasos, de jugadores que o bien su contrato está cercano a finalizar o bien creen que su rendimiento es lo suficientemente alto como para sacar algo jugoso a cambio. O mientras tanto, otros equipos ven este año como una magnífica oportunidad para llegar a la gloria y quieren dar el último barniz a su plantel para ser más competitivos aún.
Voy a analizar, como siempre, desde mi modesta visión, las distintas divisiones.
LIGA AMERICANA
División Este
Si queremos sacar una visión gráfica de esta división en esta primera mitad de temporada, sería un sándwich donde el pan de molde serían los Red Sox y el condimento serían los Rays. Porque el protagonismo claramente ha sido así, primero para la franquicia de Massachussets, luego para los de Florida para acabar con los Red Sox, que acaban con el mejor record actual de la Liga Americana y a poco de los Giants como mejor record de toda la MLB.
Y es que lo de los Red Sox es una bofetada a los que menosprecian la labor de los entrenadores. Sin grandes cambios en la plantilla, los Red Sox que tanta pena dieron el año pasado defendiendo su título de campeón del 2019 lo están bordando en este 2021 amparándose en una línea ofensiva que está siendo difícil de parar. Alex Cora, una vez acabada la sanción por el escándalo de los robos de señales, volvía a entrenar a los Red Sox y el cambio ha sido espectacular. Terceros de la liga en promedio de bateo, sextos en OBP o terceros en slugging certifican que la ofensiva está a nivel de cualquier equipo de la liga. J.D. Martínez tuvo un comienzo de año de MVP aunque se ha diluido un poco, pero Rafael Devers le ha cogido el testigo. Y los siempre regulares Bogaerts o Verdugo están a un muy bien nivel contando, además, con las aportaciones puntuales de los fichajes de este año, Hunter Renfroe y Kike Hernandez. En defensa, sus números son bastante promedio con una rotación endeble donde Nathan Eovaldi está siendo el brazo más fiable y los Martin Perez o Nick Pivetta están manteniendo al equipo en sus aperturas. Cuentan, además, con la baza de la presumible vuelta de Chris Sale, bastante cercana, que les tiene que dar un plus para luchar por metas más altas. El bullpen está siendo correcto destacando los 18 saves de Matt Barnes en 21 oportunidades.
Los Rays, a comienzos de junio, era el mejor equipo de la liga americana con un equipo, como siempre, atractivo de ver y donde siguen haciendo el trabajo de forma admirable. Sin embargo, el mazazo de la lesión de su ace, Tyler Glasnow, les ha afectado tremendamente. Unido a que los fichajes (Michael Wacha o Chris Archer) no han funcionado, han hecho de la rotación una pequeña rémora. Hasta el fiable Rich Hill, veterano de la guerra del Vietnam, está empezando a flaquear. Y eso que siempre encuentra brazos por el camino que les ayudan. Este año les ha tocado a Shane McClanahan o Josh Fleming. El bullpen tampoco es lo más fiable con bastantes altibajos de gente como Diego Castillo o Pete Fairbanks. En ataque, está sorprendiendo el receptor Mike Zunino, con 18 HRs, líder del equipo y Randy Arozarena está demostrando que es terrenal. El promedio de bateo de los Rays es bastante bajo (octavo peor de la liga) aunque se embasa algo mejor. Veremos si Wander Franco y su hype ayudan al equipo a mejorar y Glasnow puede volver. Precisamente ahí radican las buenas noticias ya que su lesión parece mejorar (parece que va a evitar la temida cirugía Tommy John) y se espera su vuelta a corto plazo.
Los Blue Jays aparecen en una tibia tercera posición dada la creciente inversión de la franquicia canadiense. Y parece tibia porque los números en ataque son extraordinarios. Líderes en slugging, segundos en promedio y quintos en OBP. Vladimir Guerrero, Jr. es, sin duda, el MVP de la liga, luchando por la mítica triple corona (líder en promedio, RBIs y HRs). Marcus Semien está a niveles de su año donde rozó el mismo premio, 2019 y, por último, Bo Bichette, el tercero del trío superlativo de estrellas, no conoce qué es el sophomore slump, cosa que sí parece estar afectando más a Cavan Biggio. Habrá que ver si George Springer no recae de sus problemas físicos y se une al festival ofensivo. En defensa están los problemas, especialmente en un bullpen al que les está costando cerrar partidos que los Hyun Jin Ryu, Robbie Ray o el rookie Alek Manoah se lo ponen en bastante buena posición.
La decepción de la división claramente proviene del Bronx. Los Yankees están fracasando en casi todas las facetas. La ruleta rusa que se jugaron con la rotación les ha salido cruz con la decepción de Jameson Taillon y la lesión, una más de Corey Kluber, lanzador que estaba inmenso hasta entonces, con un no hitter en su bagaje. Gerrit Cole, que había sido el brazo, como siempre, en el que confiar, está irreconocible desde que se empezaran a inspeccionar a los lanzadores por el tema de las sustancias pegajosas. Al igual que Aroldis Chapman como cerrador, que ha tenido últimamente unas actuaciones para olvidar. En ataque, bastantes decepciones y constantes problemas de salud de sus estrellas, aunque menos que el año pasado. Judge y Stanton, cuando están sanos, son bates completamente top, pero Luke Voit apenas ha jugado 21 partidos. Sin embargo, el siempre fiable DJ LeMahieu está bastante modesto este 2021 y cada vez hay más dudas de Gleyber Torres. Gary Sanchez parece estar rebotando tras estar casi fuera en un lineup plagado de bates diestros. Se acaban de hacer con Tim LoCastro, jardinero central, que parece difícil que pueda solucionar todos los problemas de los bombarderos del Bronx. Aaron Boone está más criticado que nunca y veremos si se acaba su etapa como entrenador de los Yankees.
En el último puesto, ¡¡¡sorpresa!!! Los Orioles, a pesar de estar en varias ocasiones en los titulares y en las televisiones, tiene el segundo peor record de la liga tras los D’Backs. Nada sorprendente en una franquicia que parece, a veces, querer dar pasos hacia atrás voluntariamente. Y eso que Trey Mancini es el favorito al trofeo “Comeback of the year” y que Cedric Mullins está a un nivel de estrella de la liga (.322 de promedio con 14 HRs y 15 bases robadas). Ryan Mountcastle parece renacer tras un pésimo comienzo, pero poco más destacable a la espera de la subida de su prospecto top Adley Rutschman, posible pero no seguro este año. En defensa, John Means lanzó un no hitter para dar un poco de lustre a la franquicia, muy mermada por la racha de 20 derrotas consecutivas fuera de su estadio. Matt Harvey, Dean Kremer o Keegan Akin superan el 7.00 de ERA, siendo el peor trío de abridores de largo de toda la MLB. Demasiados highlights para la campaña tan pobre que están teniendo los Orioles.
MVP: Vladimir Guerrero, Jr. (Blue Jays)
Cy Young: Tyler Glasnow (Rays), a pesar de su lesión
Rookie del año: Alek Manoah (Blue Jays)
Entrenador del año: Alex Cora (Red Sox)