Ante la incapacidad de que la MLB y la Asociación de Jugadores de Béisbol (MLBPA) se pongan de acuerdo para comenzar de una vez la temporada 2020, he pensado que nada mejor para calmar la sed de béisbol que ver películas de nuestro deporte. Que conste que no soy muy objetivo con ellas, ya que sólo el mero hecho de gastar dinero y tiempo en hacer un pequeño homenaje al béisbol ya hace que merezca la pena la película. Pero he intentado valorarlas según tres premisas importantes. La primera, lógicamente, es la calidad de la película. La segunda, cómo tratan el deporte. Y la tercera, por la verosimilitud de las escenas deportivas.
Ya sé que no son todas las que hay, pero me ha parecido que quizá sean las más representativas.
Ahí va mi pequeño homenaje a cada una de ellas y, finalmente, mi ranking de películas preferidas.
Entre el amor y el juego (For the love of the game)
Billy Chapel, pitcher diestro eterno de los Detroit Tigers, se enfrenta a los New York Yankees en el Yankee Stadium en el último partido de la temporada pudiendo apartar a los Yankees de ir a los play off. Los Tigers no se juegan nada, pero puede ser el último partido de la carrera de Chapel debido a la avanzada edad del protagonista, la posible marcha de su sempiterna pareja de la ciudad y la presión del propietario para que se retire. Este partido le sirve para repasar tanto su carrera como su vida como su relación amorosa con Jane Aubrey, interpretada por Kelly Preston.
Mi impresión: Una película perfecta para poder verla con tu pareja aún si no le gusta el béisbol. Tanto las escenas de béisbol como las que son fuera del campo están bastante conseguidas logrando una agradable película. Muy creíble una vez más Kevin Costner como lanzador y destaca la importancia que le da a su relación con el cátcher, su amigo Gus Sinski. También refleja cómo los altibajos de un jugador profesional afectan, y de qué manera, a la relación personal con la pareja.
El momento: Cuando está cerca de lograr el partido perfecto y antes de entrar a la última entrada, pide una pelota al ayudante y escribe en ella que se retira por amor al juego para que se lo entregue al dueño del club y pueda cerrar la venta del club a los nuevos propietarios, condición indispensable para que se produzca dicha venta.
La frase: “¿Te han roto alguna vez el corazón?” Le pregunta Jane a Billy. “Sí, cuando perdimos el campeonato en 1987”.
¿Realidad o ficción?: Pocos jugadores conocidos aparecen en la película, aunque los equipos que salen, tanto los Tigers como los Yankees, son los verdaderos. Sin embargo, sí aparecen jugadores menores como Ricky Ledee, Steve Lyons, Juan Nieves, Bob Sheppard o Pedro Swann aunque quizá el personaje más conocido sea el de Vin Scully, la voz de los Dodgers durante años, que narra el partido perfecto de Chapel. O por último, Mike Buddie, un antiguo relevista, que no sólo asesora a Costner para el papel sino que tiene un papel marginal en la película.
Premio a la más romántica.
Ellas dan el golpe (A league of their own)
En 1943, aprovechando que los hombres estaban en la Segunda Guerra Mundial, las mujeres deciden formar un equipo y jugar al béisbol para que no se paralice la competición. 2 chicas de Oregon marchan a Chicago para jugar en un equipo, donde el entrenador abusa más de la cuenta del alcohol. Así, jugarán en la primera liga profesional para mujeres.
Mi impresión: Aunque la cantidad de clichés respecto a las mujeres y el béisbol son infinitos, se trata de una película muy interesante donde las escenas de béisbol están muy bien grabadas y la interpretación de Tom Hanks es espectacular, así como la relación fraternal de Dottie y Kit. Sin duda, la recomendaría.
El momento: Es complicado encontrar un mejor momento en la película que la colisión en el home de las dos hermanas que decidirá quién es el campeón.
La frase: Hay dos por encima de todas. La primera es la de Tom Hanks saludando al público y diciendo “Vaya rollo. Podéis besarme el culo” y la otra cuando Tom Hanks le dice a una de sus jugadores “¿Estás llorando? No se llora en el béisbol. Mi entrenador Roger Hornsby me llamó saco de mierda de cerdo parlante. ¿Y sabes qué hice yo? No llorar. Porque en el béisbol no se llora”.
¿Realidad o ficción?: Aunque la película está supuestamente basada en la realidad, digamos que es una aproximación. Jimmy Duggan fue un jugador de béisbol, pero para nada tan bueno como aparenta en la película. El real Duggan apenas jugó un partido en las ligas mayores. Sin embargo, parece que está basado en una mezcla de Jimmie Foxx y Hack Wilson, dos estrellas que tuvieron problemas con el alcohol. Como Mickey Mantle. Y Dottie Hinson parece estar inspirada en Dorothy “Kammie” Kamenshek, que era la mejor bateadora de su época, aunque no era cátcher, sino que era primera base y exterior.
Premio a la más femenina.
Campo de sueños (Field of dreams)
Ray Kinsella es un agricultor de maíz en una plantación de Iowa que, tras oír una misteriosa voz que le dice “Si lo construyes, vendrá”, se decide a construir un campo de béisbol en medio de su maizal esperando que el ídolo de su padre, Joe “Shoeless” Jackson, famoso por ser suspendido tras el escándalo de los White Sox en 1919 donde se dejaron ganar las Series Mundiales, venga a su campo a jugar. Esto le supondrá casi entrar en bancarrota mientras recorre medio país siguiendo las instrucciones de la voz, junto a un espectacular James Earl Jones interpretando a Terence Mann.
Mi impresión: Si lees el argumento, nadie apostaría que esta película iba a ser referencia de nada, pero la atmósfera de la película es embriagadora. Siendo un poco ida de olla, la película es preciosa y el sabor y olor a béisbol es espectacular. Una cosa que siempre me he preguntado es el porqué del mote de Calcetines cuando Shoeless significa descalzo. Curioso que Calcetines también sea el lobo famoso de otra película famosísimas de Kevin Costner, Bailando con lobos. Quizá echo un poco de menos más escenas de béisbol, pero la película logra dejarte un muy grato sabor de boca.
El momento: Es difícil destacar uno, pero el primer contacto entre Ray y Shoeless Jackson es conmovedor. Es la hija quien ve a un hombre en el campo y va a comunicárselo a sus padres. Lógicamente, la aparición final del padre de Ray tampoco le va a la zaga, pero me quedo con el primero.
La frase: Es dífcil quedarse con una. Ahí van un par. “¿Es esto el cielo?”, le preguntan a Ray tanto Joe “Shoeless” Jackson como su padre a Ray. “No, esto es Iowa”, les contesta Ray a ambos. “Yo pagaría por jugar a béisbol”, le dice Joe “Shoeless” Jackson a Ray cuando aparece en el campo.
¿Realidad o ficción?: Todos los personajes de los White Sox que aparecen en el film son reales y famosos por el escándalo de 1919. Lógicamente el que se lleva todo el protagonismo es Joe Jackson.
Premio a la más mítica.