A comienzos de 2020, cuando el coronavirus era como el guion de una película de terror y no una realidad que nos ha dejado sin derechos y bienes individuales básicos, me planteé hacer una serie de entrevistas a jóvenes chavales de nuestro béisbol que estaban empezando a firmar por franquicias de la MLB para formar parte de sus organizaciones y poder aspirar, algún día, a cumplir el sueño de jugar en la MLB.
Fruto de esa idea, surgieron varios contactos que cristalizaron y otros que se quedaron en stand by debido a la situación mundial. Así, se pasaron por estas páginas, por ejemplo, los jóvenes Marc Civit y Eduardo Domínguez a contarnos sus impresiones, cara al gran paso que daban, cruzar el charco e intentar hacerse una carrera en las franquicias estadounidenses.
Casi un año después de empezar, muchos de estos chicos que despuntaron en la selección sub-18 que disputó la copa del mundo en Corea del 30 de Agosto al 8 de Septiembre de 2019 tras ser subcampeones europeos en 2019, viven con inquietud el devenir de la pandemia y sin saber cómo les va a afectar a su carrera profesional.
Mucho se ha hablado y escrito de lo que les ha afectado a los profesionales las temporadas reducidas del año pasado, a los equipos la bajada de ingresos por venta de entradas, merchandising en el campo, etc… pero la parte más frágil del negocio está más abajo, en todos aquellos chicos que luchan por vivir de su sueño, el béisbol. La cancelación de las ligas menores hizo mucho daño y algunos de los mejores prospectos del mundo se han visto obligados a buscarse las habichuelas por no quedarse parados un año. Por poner un ejemplo claro, el prospecto número 1 de toda la MLB, Wander Franco, ha participado en la Liga Dominicana de Béisbol (LIDOM) pero los menos conocidos han tenido que buscarse la vida por otros lares.
Aquí están las impresiones de estos chicos que siguen persiguiendo el sueño de llegar a ser un profesional de este deporte.
Por poner un poco en contexto, os recuerdo que Eduardo Domínguez firmaba por Los Angeles Dodgers en Julio de 2019 y Justin Luna hacía lo propio y por el mismo equipo en Diciembre del mismo año, Marc Civit por los Blue Jays de Toronto en Julio de 2018, Omar Hernández por los Royals en Agosto de 2018, su hermano Frank por los Cubs en Diciembre de 2019, Delson Guzman firmaba por los Brewers el 24/10/2019 y Francisco González, lanzador de los Tenerife Marlins marchaba a la Universidad de Arizona Western College para intentar entrar en el draft de la MLB.
Esta es su historia y cómo les ha afectado a nuestros jóvenes chavales.
Hace ya casi un año que empezó la crisis del coronavirus. ¿Cuál era tu situación cuando estalló todo?
Eduardo Domínguez: Cuando sucedió todo esto de la pandemia yo estaba en España en offseason Tenía previsto haber ido sobre abril para luego empezar la liga. Pero ya no pudimos viajar y se canceló todo.
Frank Hernández: Bueno, como todos sabéis el coronavirus nos ha afectado a todo. Un par de meses antes que todo empezara, firmé mi contrato profesional pero este año no pude participar con el equipo por las circunstancias que estamos pasando.
Francisco González: Estaba en medio de mi temporada y la mayor sorpresa fue que cuando la pandemia llego acá, todos los internacionales tuvimos que salirnos de los dormitorios donde nos quedábamos.
Marc Civit: Bueno, yo estaba justo a un día de marchar con el billete y todo ya enviado, y justo, un día antes, nos confinaron, y el equipo me dijo que me quedara en casa.
Omar Hernández: Yo me encontraba en EEUU, estábamos en la primera semana de spring training cuando se decidieron cancelar los entrenamientos y todo lo que había planeado.
Justin Luna: Bueno, primero estuve como 2 meses entrenando en casa haciendo lo que se podía, aunque no se podía hacer mucho. Después de esos meses, cuando dejaron salir a hacer ejercicio, comencé a correr un poco y hacer bicicleta, etc….
Delson Guzman: Yo ya estaba preparado para irme a Santo Domingo. Ya tenía el vuelo ya comprado y me habían enviado la documentación y yo me iba el 1 de Abril y claro, dos semanas antes, empezó todo esto y claro, se suspendió todo.
¿Cómo has vivido estos meses de paralización de ligas menores de la MLB? ¿Has podido jugar a béisbol en algún sitio?
Eduardo Domínguez: Pues la verdad que bastante duro aparte de por el virus porque a mi familia no les pasara nada. Casi no podía entrenar porque no se podía salir de casa. Pero pude viajar cuando se calmó todo un poco a Tenerife para poder prepararme bien y pude jugar la liga profesional de España con el equipo de Tenerife Marlins. Allí tuve una buena temporada. Tengo un ERA un poco alto (3.38) pero se debe a mi primer partido donde hice 5 walks seguidos y se me disparó el ERA a 18.00 pero luego hice una muy buena temporada (14 SO en 8 entradas con sólo 1 carrera más encajada). También jugamos un torneo con la selección española donde pudimos jugar partidos y prepararnos. Estoy muy contento porque he podido ganar 3 millas en el lanzamiento, logrando alcanzar las 93 en un lanzamiento con la selección. Han sido 5 meses de entrenamientos duros, de Lunes a Sábado. Si trabajas con constancia, puedes alcanzar lo que deseas.
Frank Hernández: Tengo muchas ganas de entrenar y jugar con el equipo. Sí tuve la oportunidad de jugar en Italia con el equipo de Paterno Red Sox. Allí coincidí con mi hermano Omar.
Francisco González: Pues han sido meses difíciles, pero, aquí, en Estados Unidos, los sitios cerraron, pero volvieron abrir. En noviembre hubo un torneo con el equipo nacional, el cual me ayudó muchísimo de cara a esta nueva temporada que estoy por comenzar.
Marc Civit: Al principio fue duro ya que había mucha incertidumbre y dudas de que iba a pasar con mi carrera. Además, estaban liberando a muchos compañeros y la preocupación crecía, pero me llegó una oferta para jugar en Italia, en el UnipolSai Bologna, y no me lo pensé mucho. Además, mi organización no puso problema y siempre estábamos en contacto con ellos. Allí pasé una de los mejores años de mi carrera ya que quedamos campeones. Alterné primer equipo con el segundo. Volvería sin dudarlo.
Omar Hernández: Es una situación difícil porque tienes que mantenerte preparado para reanudar en cualquier momento. Por suerte se me dio la oportunidad de jugar en Italia en la serie A2 y también pude jugar algunos juegos en España.
Justin Luna: He podido hacer poco, la verdad. Me fue mejor cuando me vine a República Dominicana porque aquí estaba todo más flexible.
Delson Guzman: Este parón ha sido muy duro porque claro, te deja todo en el aire. No estás jugando, todo el día en casa. Yo estaba estudiando y dejé lo que estaba haciendo porque me iba a Santo Domingo y al final, claro, no pude irme para allá.
¿Qué futuro te espera ahora que las franquicias han reducido el número de equipos afiliados?
Eduardo Domínguez: Sobre mi futuro, pues no sé nada. Yo sólo estoy enfocado en entrenar y ser mejor cada día y cuando llegue mi turno en poder demostrarlo. El resto es cosa de ellos. Yo sólo puedo controlar el jugar bien.
Frank Hernández: Espero que este año se pueda jugar ligas menores y participar con el equipo por primera vez.
Francisco González: Este año voy a disputarlo con la Universidad Arizona Western College y a ver cómo me va e intentar meterme en el draft. Ya ha empezado la pretemporada, pero también ahí cuentan los numeritos. He empezado bien lanzando cuatro entradas en blanco por lo que por ahora va todo muy bien.
Marc Civit: En teoría, tendría que viajar a Estados Unidos en cuanto se relaje todo un poco y de ahí se verá cómo se dan las cosas. La última información que tengo es que quieren empezar los entrenamientos de primavera en Abril.
Omar Hernández: Seguir trabajando duro y esperar que esta situación mejore para estar de vuelta haciendo lo que nos gusta. Este Jueves me incorporo nuevamente al equipo y a finales de Marzo viajaré a USA para el spring training de las ligas menores.
Justin Luna: Ya estoy en el complejo del equipo filial de Los Angeles Dodgers en República Dominicana. Gracias a Dios, hasta lo que sé, jugaré en verano e intentar terminar lo antes posible.
Aquí un pequeño reflejo de cómo de un día para otro todos los planes que estos chavales tenían para intentar conseguir el sueño de ser profesionales del béisbol se trunca o se ve interrumpido y cómo se presenta tanta incertidumbre para ellos y cómo se tienen que buscar alternativas para hacer lo que desean, coger el guante y lanzar o batear la pelota.
Mucha suerte a todos y esperamos que esto no trunque ninguno de los sueños de estos jóvenes peloteros.