Esta madrugada se ha disputado el cuarto partido de las series de campeonato del viejo circuito. Este partido es clave para el devenir de las series. Sobre todo es crítico para el equipo que está por debajo. Un 3-1 para los Dodgers sería devastador. Las veces en la historia que se ha remontado este marcador son muy escasas (13 veces para ser más exactos). La última vez que sucedió fue en 2016 en las Series Mundiales que ganaron los Cubs a los Indians.
No deja de ser un tanto extraño ver partidos de este calibre en ballparks con una asistencia tan baja de espectadores. Esto le quita parte del aroma especial que tienen estos partidos. No obstante las circunstancias así lo obligan.
Los Dodgers empezaron el partido con Clayton Kershaw al montículo. Con respecto al lineup, no ha habido grandes cambios con los demás partidos de la serie.
Los Braves designaron como abridor a Bryse Wilson. El lineup, como en el caso de los Dodgers, no ha deparado grandes sorpresas.
Las dos primera entradas fueron resueltas sin mayores complicaciones por los abridores. Únicamente llegaron a bases Acuña Jr. y Albies con sendos sencillos.
En la tercera entrada vimos el primer cambio en el marcador. Un home run solitario de Edwin Ríos ponía por delante a los angelinos. Por lo demás, no hubo nada más destacable en la entrada que el sencillo de Camargo.
En la cuarta entrada los Braves igualaron en tanteo con un home run solitario de Marcell Ozuna. No hubo nada más reseñable en esta entrada que una base por bolas concedida por cada abridor.
En la quinta entrada los dos abridores eliminaron a los tres bateadores a los que se enfrentaron. Esta fue la primera entrada en la que Kershaw no permitió que llegara algún bateador a las bases.
El abridor de los Braves liquidó por la vía rápida la parte alta de la sexta entrada. En la parte baja, Kershaw fue castigado duramente por los bates de los Braves. Tres hits consecutivos de Acuña Jr., Freeman y Ozuna pusieron fin a la actuación del abridor angelino. Con el marcador 3-1 a favor de los de Atlanta, Dave Roberts dio entrada a Graterol con la esperanza de que se frenara la sangría de carreras. Este cambio no surtió efecto. Después de otros tres hits Graterol fue cambiado por Víctor González. El marcador estaba ya en un 6-1 a favor del equipo de Georgia. La entrada finalmente acabó con otra carrera más en el casillero de los Braves. Al acabar la entrada el partido estaba muy cuesta arriba para los Dodgers con un 7-1 en contra.
En la parte alta de la séptima entrada el manager de los Braves dio por finalizada la actuación de Wilson. Will Smith fue el relevista elegido por Snitker para esta entrada. En este momento se le abrió a los Dodgers las puertas de par en par para meterse en el partido. Consiguieron llenar las bases con un solo out en el casillero. Para intentar evitar males mayores, el manager de los Braves cambió a Will Smith por Chris Martin. Finalmente Martin consiguió cerrar la entrada (eso sí, con mucho suspense) dejando los daños a solo una carrera sumanda por los angelinos. En la parte baja de la entrada Ozuna volvió a erigirse como héroe y puntal de estos Braves con otro home run (esta vez contra Dylan Floro). Al finalizar la entrada el marcador reflejaba un 8-2 favorable a los de Georgia. La sensación era que los Dodgers habían quemado su último cartucho para intentar levantar este partido. Había caras de profunda tristeza y decepción en el dugout angelino.
En la octava entrada Tyler Matzek sustituyó a Chris Martin. El relevista de los Braves cerró la parte alta de la entrada sin muchas complicaciones. En la parte baja de la entrada los Braves siguieron hurgando en la herida de los Dodgers. Los de Georgia sumaron otras dos carreras en el casillero. El 10-2 que reflejaba en el marcador dejaba el partido visto para sentencia.
Shane Greene liquidó la parte alta de la novena entrada por la vía rápida cerrando así la victoria para los Braves.
Con respecto a este partido hay varias cosas que comentar.
Clayton Kershaw, futuro Hall of Fame, otra vez va a ser objeto de críticas por su actuación. A mi me parecería injusto criticar en exceso la actuación de Kershaw. Si exceptuamos la sexta entrada, su actuación ha sido bastante buena. Aquí entramos en el debate de si Dave Roberts debía haber cambiado o no a Kershaw en la sexta entrada. Dos factores nos hacen indicar que debía haberlo hecho. Uno de ellos es que el abridor angelino venía de tener problemas físicos en los días previos al partido. Eso nos hace pensar que no llegaba en plenitud de forma al partido. El otro factor es que Kershaw se iba a enfrentar al lineup de los Braves por tercera vez. Estadísticamente, por regla general, los lanzadores suelen empeorar su rendimiento a la tercera vez que se enfrentan al lineup contrario. Por otro lado el hecho de que Kershaw lo estaba haciendo bien y que su conteo de pitcheos no era excesivamente alto eran factores a favor para mantenerlo en el montículo. Hay que añadir también que un cambio de lanzador no es un seguro de nada para evitar carreras. Así pues el debate está servido. Ahora todo el mundo sacará el manager que tiene dentro. No obstante, la decisión para Roberts no era fácil.
Los bates de los Braves están en estado de gracia en esta eliminatoria. La parte alta del turno de bateo está destrozando el pitcheo de los Dodgers. Aquí quiero destacar la actuación de Freeman. El primera base de los Braves es uno de los jugadores más infravalorados de toda la liga a pesar de que lleva muchos años rayando a un gran nivel. Personalmente me gustaría que ese rendimiento tuviera su recompensa esta temporada.
El pitcheo de los Dodgers no está consiguiendo frenar al turno de bateo de los de Atlanta durante la NCS. Si los angelinos quieren tener alguna opción de remontada, van a tener que minimizar bastante más la producción de carrera de los Braves. Un problema grande para este objetivo es que el pitcheo de relevo acumula muchas entradas. Por si fuera poco esto, la actuación de los relevistas tampoco está siendo muy destacada. Por lo tanto se antoja clave que Dustin May (probable abridor para el quinto partido) llegue lejos en su apertura.
Finalmente no quería dejar pasar por alto la actuación de Bryse Wilson. Algo que no deja de fascinarme de la MLB es la capacidad que tiene ésta para crear héroes anónimos. En este sentido podemos decir que es el deporte más democrático de todos. En casi todas las postemporadas tenemos héroes inesperados que tienen su momento de gloria en Octubre. Está por ver si Wilson tendrá una carrera destacada en las mayores. Sin embargo, nadie le podrá quitar ya su momento de gloria en Octubre.