Artículo de Fernando Díaz (@FernandoDiazMLB) nos habla de las Promesas MLB.
La nueva temporada en las Mayores nos presenta un gran número de jugadores que aspiran a convertirse en piezas fundamentales en sus respectivos equipos.
Si hay algo que en el béisbol suele despertar el imaginario y por extensión la alegría de los aficionados de los distintos equipos es el ascenso imparable de sus promesas. Afiliados en el sistema de granjas de cada una de las 30 franquicias de las Mayores, esos diamantes en bruto confían en asentarse al más alto nivel y convertirse en el nuevo Mike Trout, José Altuve, Aaron Judge o Cody Bellinger, siendo estos dos últimos promocionados definitivamente el año pasado y se convirtieron en dos de las rutilantes superestrellas de este gran deporte.
En ese sentido, vamos a repasar algunos de los jugadores que han brillado con mayor intensidad en las Menores y cuyo impacto se podrá notar en la MLB en algún momento del nuevo año si su progresión es la correcta. No obstante, señalamos que no se trata del listado de las mejores promesas del béisbol y aquí no vais a encontrar a Vladimir Guerrero Jr., Eloy Jiménez u otros puesto que no se les espera para esta campaña. Afortunadamente, su influencia se hará notar en un futuro no muy lejano.
Igualmente hemos hecho una pequeña ‘trampa’ puesto que no hay mención alguna a Shohei Otani, el ultratalentoso japonés que quiere dejar su impronta en las Mayores como miembro de la rotación de Los Angels al igual que en el plate como su bateador designado en contadas ocasiones. Nos hemos centrado exclusivamente en aquellos jugadores que estaban adscritos al sistema de granjas en 2017 y que no provienen de otra liga como es en su caso.
1. Ronald Acuña OF (Atlanta Braves)
Existe una cierta idea generalizada sobre que el venezolano se ha afianzado como la mayor promesa en las Ligas Menores y razones no faltan. Ascendiendo de la Clase A alta a la Triple A, Acuña fue capaz de batear un .325 de bateo con 21 home runs y 44 robos de base entre todas las categorías. Lo más impresionante no fue solo su ascenso meteórico hasta situarse a la puerta de las Mayores sino los ajustes que fue haciendo según se incrementaba la dificultad a la tierna edad de 19 años. Grandísimo favorito al rookie del año en la Nacional, su rango de habilidades le permite soñar con cualquier posibilidad y es la mayor promesa que sale de su sistema desde Andruw Jones en 1997. Empezará el año en la Triple A, pero llegará a Atlanta antes de que acabe abril para retrasar un año su llegada a la agencia libre.
2. Gleyber Torres 2B (New York Yankees)
Obtenido en la fundamental operación que permitió a los Cubs acabar con su sequía de 108 años, Torres se ha afianzado como la mayor promesa de la organización de los Yankees desde su llegada. Desgraciadamente, sufrió una grave lesión en su codo corregida vía Tommy John que le obligó a pasar por el quirófano, aunque se espera una recuperación total. Su presencia en el Bronx no va a tardar en producirse, ya fuera en segunda o en tercera base porque sus talentos son de los que marcan época. Al igual que Acuña, se espera que empiece el año en las Menores para manipular el tiempo de servicio y darle la confianza necesaria antes de un salto exigente.
3. Nick Senzel 3B (Reds)
En un equipo que anda en pleno proceso de reconstrucción y que tiene en sus filas al bateador más inteligente de la actualidad en Joey Votto, la presencia de Nick Senzel es una bocanada de aire fresco. Se desconoce cuál será la posición definitiva, aunque se desenvuelve en la esquina caliente desde el draft y se le valora tanto en segunda como en el short, pero su avanzado conocimiento de la zona de strike y un potencial extraordinario le sitúan como uno de los valores a seguir en algún momento de la temporada. Se avecinan tiempos mejores para los de Ohio.
4. Michael Kopech RHP (White Sox)
Nadie posee una recta más poderosa que la del antiguo canterano de los Red Sox que ahora luce otras medias. Más allá de unos problemas de carácter que ponían en cuestión su futuro en las Mayores, sus talentos inmensos fueron claves a la hora de destacar en la operación que llevaría a Chris Sale a Fenway. Ahora con una organización que le ha dado todo el tiempo necesario para completar ese proceso de madurez, su errático control puede ser su mayor enemigo a la hora de confirmarse como el número uno que desean en la gerencia del club.
5. Walker Buehler RHP (Dodgers)
Otro producto más de la fábrica de talentos que es la universidad de Vanderbilt, Walker Buehler es la mayor promesa desde el montículo para los de Chavez Ravine y una que fue capaz de pasar de la clase A alta hasta las Grandes Ligas. Pese a su delgada complexión, el arsenal de Buehler está muy por encima de la media en todas sus propuestas y la recta es demoledora. Se supone que empezará el año en la Triple A para darle la oportunidad de seguir perfilándose como uno de los valores de futuro del club, pero le veremos según transcurra la campaña, ya sea como un miembro más de la rotación o desde el bullpen, a no ser que fuerce la situación durante el spring training puesto que nunca se puede descartar.
6. Álex Reyes RHP (Cardinals)
Al igual que en el caso de Gleyber Torres, este pitcher también debe recuperarse totalmente de la Tommy John, pero no hay nada que nos haga pensar lo contrario viendo el gran porcentaje de éxito de la cirugía. Armado con un arsenal pleno de poderío en todas sus variantes, el mayor hándicap que puede tener el dominicano es un control mejorable de la zona de strike lo que le lleva a acumular demasiados corredores en base. No se puede descartar que una vez que vuelva en algún momento de la temporada a St. Louis lo haga en un perfil más bajo desde el bullpen, pero es una figura de presente y sobre todo de futuro para los de Missouri.
7. Lewis Brinson OF (Marlins)
Dentro del panorama desolador en el que han quedado los Marlins, Lewis Brinson se perfila como faro de esperanza para los de South Beach. Obtenido en la operación que llevó a Christian Yelich a Milwaukee, este atlético jugador se ha convertido inmediatamente en el más prometedor de un sistema de granjas que no pasaba por su mejor momento sino todo lo contrario. Los talentos de Brinson son extraordinarios y se le van a dar todas las opciones para encargarse del sector central y confía en que su tercera ya organización en el béisbol profesional sea la que le permita alcanzar todo su potencial.
8. Scott Kingery 2B (Phillies)
Aunque los Phillies tienen a un jugador como César Hérnandez que se ha mostrado como alguien más que válido para el puesto, la idea es que Kingery se convierta en el hombre del presente y futuro de la organización en segunda base, más si cabe tras su glorioso 2017 que le situó a las puertas del Gran Show. Con un juego muy sólido a todos los niveles, va a ser otra de las piezas de futuro del interesante proyecto que se está gestando en la ciudad del Amor Fraternal.
9. Luiz Gohara LHP (Braves)
La operación que llevó a este brasileño hasta los Braves fue un enorme acierto de la ahora denostada etapa de John Coppolella y su llegada fue un refuerzo más a la organización más completa que hay en la MLB. Pese a sus 21 años, el carioca llegó a debutar con Atlanta en un ascenso fulgurante a través de todas las categorías inferiores. Se le pueden encontrar similitudes con un joven C.C. Sabathia, con una recta que es capaz de superar con solvencia las 95 millas por hora, pero con un control todavía por refinar. Al igual que en el caso de C.C., tiene que prestar atención a su condición física para que no le afecte sobre el campo. Conserva intacta su condición de rookie con lo que podría ser uno de los ‘tapados’ para hacerse con el premio al final de la próxima campaña.
10. J.P. Crawford SS (Phillies)
La hora de Crawford ha llegado a Philadelphia y su toma de contacto el año pasado es buena muestra de ello. El club confía en él y le ha dado la titularidad indiscutible tras formalizar el traspaso de Freddy Galvis a los Padres con lo que tiene que mostrar que esa confianza está justificada. El guante de Crawford es su mayor activo y tiene un potencial extraordinario, pero su intrigante falta de potencia a pesar de su capacidad de poner la bola en juego puede llegar a limitar su impacto definitivo. No obstante, sus 22 años todavía le dan margen para cumplir con las expectativas.
Mención especial a Víctor Robles (OF, Washington Nationals), Kyle Tucker (OF, Houston Astros), Miguel Andújar (3B, New York Yankees), Willy Adames (SS, Tampa Bay Rays), Jack Flaherty (RHP, St. Louis Cardinals), Álex Verdugo (OF, Los Ángeles Dodgers), Franklin Barreto (SS/2B, Oakland Athletics) o Willie Calhoun (2B/OF/DH, Texas Rangers).