Me atrevo a decir que ni los más optimistas del lugar hubiesen pensado que Miami se iría al parón con el 2º mejor récord de la Liga Nacional y el 5º de toda la MLB (53-39). El conjunto de Skip Schumaker ha conseguido el segundo mejor registro de la historia de la franquicia antes del parón del All-Star. Ahora mismo, estos Miami Marlins 2023 están en el top 3 de mejores números de la historia de los peces. Siendo las otras dos temporadas las que el equipo de Florida se alzó con la Serie Mundial (1997 y 2003).
Un conjunto mucho más coral y con destacadas actuaciones que han llevado al equipo a mantener una línea constante de juego. Sin muchos fuegos artificiales pero sí con un estilo consciente de las
limitaciones y los puntos fuertes de esta plantilla. Y el mayor culpable es el manager novato, Skip Schumaker. En su primera temporada como cabeza del cuerpo técnico, está siendo capaz de sacar provecho de unos jugadores que parecían desmotivados.
RESUMEN:
Una de los calificativos que podemos usar para Miami es, competitivo. Con balance favorable en ambas ligas (33-32 Liga Nacional; 20-7 Liga Americana), y consiguiendo llevarse el enfrentamiento directo con rivales directos cómo los Arizona Diamondbacks o los Chicago Cubs. En la otra liga se ha hecho con grandes resultados sólo cediendo en Seattle y ante los Blue Jays en Miami.
Un equipo sustentado en el pitcheo, con una rotación Top-10 de la liga (los que menos home runs permite y con un WHIP del 1,22). A pesar de los problemas físicos, que ya es algo normal en los lanzadores de los Marlins, ni de la mejor versión del Cy Young Sandy Alcántara. Los zurdos Jesús Luzardo y Braxton Garrett, junto al novato Eury Pérez, han sido los responsables de mantener a flote una rotación mermada por los casos de Trevor Rogers, Edward Cabrera y Jhonny Cueto.
Ha ello hay que añadir un bullpen capaz de sostener las ventajas con el nuevo cerrador AJ Puk (15 salvados) y la actuación de Tanner Scott, Andrew Nardi, Steven Okert o el dominicano Huascar Brazoban.
Y en la faceta ofensiva se ha mejorado bastante respecto temporadas anteriores, con un equipo que rentabiliza las carreras que consigue, así cómo ser capaz de dar la vuelta a los partidos. Todo ello gracias al contacto que ha sido capaz de producir el equipo, liderado por quién sino, Luis Árraez (+100 imparables).
Miami es el segundo de la MLB en hits y en .AVG, sin embargo, en facetas que decantan a los grandes equipos aún no somos capaces de llegar (mitad-baja de la liga en .OBP/.SLG/.OPS). Antaño no teníamos ni un jugador por encima de los .260 bateando y, a día de hoy, encontramos hasta 7 jugadores por encima de esos registros. Soler ha vuelto a mostrar sus mejores galas en el cajón con 24 HRs, así cómo Bryan De La Cruz o Jazz Chisholm Jr. que otro año más está lidiando con las lesiones y su presencia en la alineación siempre da un plus de velocidad y personalidad.
MVP:
Luis Sangel Árraez. El venezolano es cómo esa Regadera que da vida a las flores. Su carácter competitivo y su capacidad élite de contactar con la pelota, fuera de cualquier civilización extraterrestre, ha dado ese empujón para que sus compañeros tengan más confianza a la hora de batear. Y es que en el loanDepot park no veían a un bateador cerca de los .400 desde…. ¿Quién sabe?. Es algo alucinante para los aficionados de los Marlins en el último lustro.
Sin duda alguna no sólo es el MVP del equipo sino el mejor bateador de la MLB, poniendo unas cifras qué sólo Hall of famers han sido capaz de lograr. Luis Árraez está en la misma mesa que Ted Williams, Stan Musial o Rod Carew cómo los únicos peloteros en llegar al parón de temporada con .383/+ de promedio en 200 apariciones al plato y conseguir empujar carrera en el partido de las Estrellas. Dónde consiguió un 2-2 con 2 lanzamientos.
Para reflejo de su gran talento, Luis Árreaz ha sido el primer bateador en la historia de los Marlins en conseguir un Ciclo (hit, doble, triple y jonrón en un mismo partido). Necesitó 12 partidos de temporada regular para entrar en los libros de historia de la franquicia de Florida (11 abril de 2023 vs Phillies). Su lucha para acabar en .400 AVG es una de las mejores historias de esta temporada en la MLB.
CY YOUNG:
Pocas veces podréis leer que el mejor lanzador de un equipo está fuera del roster actual y jugando en las Ligas Menores. Sin duda es un caso excepcional. Estamos hablando del prospecto número uno de los Marlins, Eury Pérez.
Por circunstancias de lesiones, el dominicano Eury Pérez hacia su debut con los Marlins el 12 de mayo con apenas 20 años recién cumplidos. Siendo el lanzador más joven de la MLB.
En sus 11 aperturas ha lanzado 53,1 IP, enfrentando a 215 bateadores, dejando un 2.36 ERA, 10.3 K/9 y 1.08 WHIP. Mejorando el inicio de otra leyenda de Miami, José Fernández.
El equipo ha decido ser cauto ante la exposición tan temprana del talentoso dominicano y lo ha vuelto a bajar para cuidar un brazo que aún le quedan grandes noches que lanzar. Estoy seguro que si el equipo está en la lucha por los playoffs, Eury volverá para ser otra amenaza más encima del montículo.
SORPRESA:
Con la buena dinámica del equipo y el buen desempeño del equipo en la primera mitad de la temporada es difícil quedarse con alguien. Pero creo que si alguien merece esta mención especial es el abridor zurdo Braxton Garrett. Selección de primera ronda del draft 2016, siempre ha vivido a la sombra de Trevor Rogers.
Garrett ha sido capaz de adaptarse a un juego muy duro, que de primeras le dejo noqueado, pero que con su arsenal variado de lanzamientos ha entendido mejor cómo enfrentar a bateadores MLB.
Más allá de unos buenos números para el que a priori era el 5o abridor (18 partidos iniciados, 97 IP, 3.90 ERA, 106 K (segundo mejor del equipo por detrás de Luzardo)), sus sensaciones encima del montículo han sido muy buenas Con una gran combinación de sus diferentes lanzamientos y una confianza en el equipo que ha hecho que de las 18 aperturas, los Marlins han ganado 14 partidos.
Quizá he sido injusto con Jesús Luzardo, que, de seguir a este nivel, puede ser una opción para el Cy Young. Por el momento ha conseguido establecer su mejor temporada con 19 aperturas y 109 IP, algo que nunca había sido capaz de lograr debido a las lesiones.
DECEPCIÓN:
Obviando que defensivamente el nivel es bueno y son un factor positivo para los lanzadores, el cuerpo de receptores de los Marlins son de lo peor ofensivamente hablando. Entre Nick Fortes, que ha cogido un rol más protagonista, y Jacob Stallings, llevan un .204 de promedio y un .551 OPS, de los tres peores de toda la liga.
Por otro lado tenemos a Jean Segura y Avisaíl García. Es cierto que el dominicano ha adoptado un papel que es nuevo, pese a su experiencia en Las Mayores, jugando de tercera base. Su desempeño no ha sido todo lo mejor que podíamos esperar pero al final es un parche que ha usado el equipo con un jugador no habituado a la esquina caliente. Detrás de los receptores, la peor ofensiva la tiene Segura con números pobres respecto a lo que conocemos de él.
Por último, quiero detenerme en Avisaíl García. Este año sólo ha jugado 22 partidos y desde entonces una lesión le ha apartado. Jonathan Davis, suplente en Detroit y Dane Myers (drafteado cómo lanzador, jugando en el jardín central). Ambos se han visto mejor en el cajón de bateo que el venezolano Avisaíl Garcia.
EXPECTATIVAS:
Ha quedado reflejado que en el deporte se tiene que demostrar las cosas en el terreno de juego. ¿Será suficiente para llegar a post-temporada? Con algunas adiciones a la temporada actual, puede que sí. La segunda mitad es muy dura y está visto que hay que subir el nivel en diferentes aspectos para tener opciones más reales.
Miami debería salir al mercado a buscar otro brazo abridor que de profundidad a una rotación necesitada de descanso. Por otro lado, la receptoría tiene que mejorar sí o sí. Es pieza fundamental y Salvador Pérez sería de gran ayuda. También debería haber una mejora de talento que venga en forma de poder y que sume a los Árraez, Soler, etc.. Figuras como Luis Robert sería ideal para tener un CF que llevamos años buscando; Candelairo podría aportar mejor producción que Segura en tercera base.
Al final, Kim Ng tiene que rematar una buena faena hecha este último año. Movimientos que puedan dar continuidad al equipo y a la general manager. Recordemos que finaliza contrato al acabar la temporada.
Que la ilusión se mantenga y no sea una ilusión más, aunque esta temporada, mejora con creces lo vivido en Miami los últimos años.