Por fin se va acercando la vuelta del baseball a nuestras vidas. En menos de un mes, los pitchers de los equipos empezarán el Spring Traning.
Los equipos ya están cerrando sus plantillas y dando los últimos retoques. Construir un equipo competitivo en estos tiempos en los que ya todos usan estadística avanzada y análisis de datos es cada vez más difícil.
Pero si hay una posición que la Gerencia no puede fallar, es la de pitcher abridor.
Solo hay 5 puestos en la rotación, y del cuidado y del acierto con que se elijan, dependerá el éxito de la temporada. El número mágico que dice que se acertó de pleno en la elección es que ese pitcher alcance las 20 victorias ese año.
En un equipo bien construido tiene que funcionar todo, defensa y ataque, si solo se centra en una de las dos, vendrán los problemas tarde o temprano.
Los grandes equipos de baseball son los que bateo y pitcheo van de la mano, compenetrados y conjuntados, funcionan ambos a la vez como una única entidad. Si al equipo, a veces lo guía solo uno, y a veces solo otro, acabará como el coche que llevaba el ciego Richard Pryor guiado por el sordo Gene Wilder en “No me chilles que no te veo” (1989): el batacazo será inevitable.
Vamos a ocuparnos de la rotación que tiene ahora mismo los Chicago Cubs.
Los 4 primeros elegidos parecen claros:
Pero es el quinto nombre el que se está haciendo de rogar:
Suena con insistencia Yu Darvish (incluso se acaba de fichar a Chris Gimenez, su cátcher personal en los Rangers) también se habla de la vuelta de Jake Arrieta a la Ciudad del Viento. Pero estas dos opciones serían de las posibles, las más caras.
Uno de los preferidos por el equipo técnico es Alex Cobb, el nuevo pitching coach Jim Hickey lo tuvo a sus órdenes en los Tamba Bay Rays y parece ser que la única razón por la que no se le ha fichado es únicamente por el montante económico que pide, al parecer excesivo para la Gerencia. Pero si se llega a un acuerdo económico, no hay más vueltas que darle, Cobb sería el quinto hombre de la rotación.
Pero si no fructificase ninguna de estas contrataciones, la solución podría estar en casa: el relevista zurdo Mike Montgomery ya ejerció ese papel el año pasado, pero tiene el inconveniente de que dejaría un poco huérfano al bullpen. Recurriendo al sabio refranero popular: “No trates de tapar un hueco haciendo otro.”
Así que están sonando con fuerza otra opción, que de las posibles, es la más barata, rellenarlo con alguno de estos dos prospects provenientes del farm system:
Jen-Ho Tseng
Llamó la atención de los ojeadores de los Cubs cuando representó a Taiwan en el Clásico Mundial de Beisbol con tan solo 18 años. Firmó como agente libre en 2013.
Categorías inferiores:
- Tennessee Smokies (AA): tuvo una marca de 7-3 con efectividad de 2.99 y 83 ponches en 90 1/3 entradas
- Iowa Cubs (AAA): marca de 6-1 con efectividad de 1.80 en 55 entradas
Debutó en el primer equipo contra los Mets el 14 de septiembre del año pasado debido a las lesiones de la primera plantilla, la verdad es que no fue el debut soñado, permitió cinco carreras en solo tres entradas. Pero tiene solo 23 años y mucho margen de mejora, los scouts confían en él: fue seleccionado dos veces Lanzador del año entre todos los jugadores de las Ligas Menores de los Cubs.
Adbert Alzolay
Nacido en Puerto Ordaz (Venezuela) en 1995.
En Chicago se da por segura su incorporación como futuro pitcher abridor, pero quizá más a largo plazo. Ahora mismo es el mejor tercer prospecto de los Cubs según MLB
Categorías inferiores:
- Myrtle Beach (High-A): efectividad de 2.98 en 81 2/3 entradas
- Tennessee Smokies (AA): efectividad de 3.03 en siete salidas
Tras un ascenso meteórico por distintos equipos de las menores, este año incluso participó en el Rookie Carrer Development Program, en Leesburg, Virginia, para prospectos que ya están cerca de debutar en las Mayores. Antes de inscribirse, pidió consejo a su compatriota y antiguo compañero en los Cubs, Gleyber Torres. El ahora prospect de los Yankees le recomendó que asistiera: “será una buena oportunidad para ti porque vas a aprender cómo manejarte en las Grandes Ligas en tu primer año”
Este año tiene dos metas para conseguir ser abridor en Grandes Ligas:
- Mejorar el movimiento de sus piernas en el momento del lanzamiento
- Trabajar en su cambio. Puede lanzar su bola rápida y su bola curva siempre que quiera, pero considera que no confía demasiado en su cambio, así que trabaja duro para mejorarlo: “si quieres jugar en las grandes ligas, necesitas tener ese lanzamiento, debes de ser capaz de realizarlo en cualquier momento”
¿Por qué tanto “hype” en Chicago con alguien que no ha lanzado ni una entrada en las Mayores? La respuesta es sencilla:
El Presidente de operaciones de baseball de los Cachorros y Rey Midas de la Gerencia ha puesto los ojos sobre el muchacho y le ha dado su “bendición”:
«Es un lanzador abridor con un techo muy alto”
«Tiene una gran variedad de lanzamientos y lanzará en los niveles superiores del farm system el próximo año».
«Si alcanza su potencial, algún día será uno de los cinco abridores del equipo…y estará más cerca de ser el número uno que el cinco»,
La respuesta de Alzolay no se hizo esperar:
«Me enteré de eso», dijo Alzolay. «Es por eso que me estoy preparando. Estoy súper preparado para estar en las grandes ligas. Creo que es hora de estar allí».
Estas dos opciones se contemplan como una opción B, si no se contrata a alguno de los pitchers más experimentados, pero aun así dependerá del Spring Traning que realicen. Los ojeadores estarán muy atentos a sus avances, y quien sabe, sea este año o el que viene, si juegan bien sus armas y destacan, a lo mejor estamos ante uno de los próximos ace de los Cubs.
El futuro, nunca mejor dicho, está en sus manos.
