Las Series de División entre los New York Yankees y los Cleveland Indians no terminaron como la mayoría creía.
Empezaba la eliminatoria con la sorpresa que, para muchos, había generado que Terry Francona eligiese a Trevor Bauer en el montículo indio para el primer partido en lugar del seguro Cy Young de la temporada, Corey Kluber, y no podía estar más acertado en su criterio el de Dakota del Sur.
No olvidemos que la postemporada es, desde tiempos ancestrales, un escenario de información oculta, juego al despiste y estrategias complejas y a medio plazo, que en ocasiones se conocen a final de temporada y en otras ocasiones no.
Elección de Tito, que respondía por un lado a la situación en que quizás se encuentre Kluber, y a lo que ha conseguido con respecto a Trevor Bauer, el, en otro tiempo no demasiado estable chico, que el pasado jueves presentó su candidatura a ser el Ace del equipo.
Resultó estratosférico en seis entradas y dos tercios, permitió solo dos hits, una base por bolas, consiguiendo ocho strikeouts.
Fue ese primer partido el que mejor se ajustó al guion de los Indians, con su pitcher abridor cubriendo casi siete entradas, con Andrew Miller lanzando una entrada como setup, y Cody Allen cerrando el partido, todo ello sin permitir una sola carrera.
En el ataque le sobró eficiencia a Cleveland, además de sus cuatro carreras dejó a siete corredores en base, desaprovechando en dos ocasiones las bases llenas. Con un Jay Bruce que está a un nivel espectacular en estos playoffs.
Enfrente, un ataque anulado, solo a destacar los dos corredores en base que dejó en posición de anotar Aaron Judge en la octava. Fallando nuevamente su abridor, en este caso Sonny Gray, si bien a diferencia de Luis Severino en la Wild Card alcanzó las tres entradas y un tercio.
Eso sí, tal vez como un, extraño e irónico, presagio de lo que iba a ocurrir en la noche siguiente, Chisenhall logró embasarse una sola vez, y fue un hit by pitch.
Llegamos al segundo partido, del que tanto se ha hablado, el que parecía imposible para los Yankees, con el presunto Ace de los Indians Corey Kluber en el montículo, quien llegaba con las cifras más bajas de ERA y WHIP de las grandes ligas en temporada regular, y con CC Sabathia, quien viviese tan maravillosos años en Cleveland, por el lado de los Yankees, no con los números de Kluber, pero sí con una estadística, no tan espectacular pero si mucho más concluyente, veinte partidos de postemporada.
Las cosas salieron justo al revés, Corey Kluber, no estaría para lanzar el primero, pero tampoco el segundo, no estuvo en el partido, ni tenía capacidad de estarlo. Algo pasa con Corey. Permitió seis carreras en dos entradas y dos tercios, la peor salida de su historia en ese tramo. Dio paso a su bullpen en el que Mike Clevinguer, el starter al que se consideró un refuerzo de lujo como relevo, se llevó dos carreras en menos de una entrada. Finalmente, sería otro abridor, Josh Tomlin el que lanzaría las dos últimas entradas llevándose la victoria.
Por otro lado, CC Sabathia, permitió cuatro carreras en cinco entradas y un tercio, todo un hito para un abridor de los Yankees, teniendo en cuanta lo que venía siendo la postemporada de los abridores del Bronx.
Mucho se ha hablado de la jugada clave del partido, y lo cierto es que, aunque se produjese en la sexta, fue clave, sí.
Con la cuenta cerrada, dos eliminados y dos hombres en base, se le concedió a Lonnie Chisenhall un hit by pitch, cuando un simple visionado de la jugada deja bien a las claras que o bien la bola no tocó in al jugador ni a su bate, o solo a su bate. Con Chisenhall ya en las bases Francisco LIndor, otro jugador que habla maravillas de Francona, bateó un grand slam, que dejó el partido 8-7 y que dejó noqueado a los Mulos del Bronx.
Sorprendió que por parte del banquillo Yankee no se solicitase revisión. De hecho Joe Girardi reconoció haberse equivocado. Y hasta Aroldis Chapman dio su like a un mensaje que trataba al manager de Imbécil, aunque luego rectificase.
Cleveland empataría con un home run, del imparable Jay Bruce, llegando a entradas extras, en un partido cerrado en que, como vienen siendo norma general, los bullpens se mostraron seguros no dejándose anotar, y sería ya en la treceava, Dellin Betances quien se haría con la derrota, anotando la novena carrera Austin Jackson, impulsado por Yan Gomes.
La nota negativa del partido la dio Edwin Encarnación, quien se lesionó en la primera entrada, en principio parecía de gravedad, si bien, afortunadamente, volverá en esta postemportada.
Fueron más de cinco horas de un partido loco, como tantos otros en esta postemporada, que serán muy emocionantes, trepidantes, divertidos y lo que queramos, pero que no son el béisbol de trabajo defensivo que nos gusta.
Llegábamos a un tercer partido en un enfrentamiento Carlos Carrasco vs Masahiro Tanaka que por fin nos dio, en la presente postemporada, un duelo de pitcheo, dos lanzadores casi sin experiencia en playoff, el primero debutaba, el segundo vivía su segundo envite, el primero no había resultado exitoso, ambos estuvieron perfectos, alcanzando los siete Strikeouts cada uno de ellos.
La única carrera del partido vino a lanzamiento de quien menos se podía esperar, Andrew Miller, quien tras limpiarle a Carlos Carrasco las bases llenas en la sexta concedió, un Home Run en la siguiente a Greg Bird, en toda la fase regular solo había concedido un Home Run a un zurdo.
Pudo anotar en la sexta lndians, pero Aaron Judge robó un Home Run de dos carreras a Francisco Lindor, con una espectacular atrapada sobre el muro que reparaba su no atrapada en la cuarta, quel llevó a Kipnis a tercera.
El partido lo cerraría Aroldis Chapman, lo de la potencia de este tío empieza a ser un fenómeno paranormal, llegó lanzar una entrada y dos tercios, permitiendo dos hombre en base pero sin más.
El pasado lunes se jugaba el cuarto partido, en el que vivimos la redención de Luis Severino, al dominicano le sirvió su hecatombe en la Wild Card, para, desde entonces, trabajar sin descanso para pulir todos sus errores, Luis creció más en unos días que en toda su carrera, y resultó el pitcher dominante del episodio cuatro. Fueron siete entradas y 113 lanzamientos.
Tal y como manifestó tras el encuentro: estuvo más tranquilo, y agradeció enormemente el trabajo de Gary Sánchez, junto a quien ha crecido beisbolísticamente en los criaderos del Bronx.
Sus nueve strikeouts quedaron a solo uno del récord de postemporada de los Yankees para un menor de veinticuatro años, que ya goza de treinta y seis años.
Enfrente, un Trevor Bauer, al que se le notó el cansancio lógico de únicamente tres días de descanso. Puede que los recursos monticulares de salida de los Indians no sean los que tanto loábamos, o que el uso de Josh Tomlin como relevista, por necesidad claro, pese a que ha dado buen resultado, haya dejado a los Indians con una rotación coja.
Pero la desacertada intervención de Trevor Bauer, no alcanzó las dos entradas permitiendo cuatro carreras, vino acompañado por la poca precisión de su defensa, cuatro errores y dos de ellos del tan seguro Giovani Urshela, dos errores que provocaron cinco carreras, las cuales resultaron decisivas.
Únicamente Dellin Betances con dos bases por bolas en la octava, y 5-3 en el marcador, dio emoción al partido pero Tom Kanhle lo cerró con cinco strikeouts en las dos últimas entradas.
Los de Ohio que no habían perdido dos partidos seguidos desde el mes de agosto se la jugarían a un solo partido, contra la dolorosa historia, de las quince ocasiones en que un conjunto había empatado a dos, viniendo de un 2-0, en series a cinco partidos, en nueve el remontador vencía en el definitivo. Esperaba Cleveland que esta vez la redención fuera para Kluber, Lindor o Ramírez, desaparecidos en hasta entonces en estas Series.
Quinto partido, los Indians llegan como claros favoritos a este partido, lanza Kluber, su mejor lanzador, ante CC Sabathia, el segundo o tercero en la rotación de los Yankees, uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla y al que sus días de gloria parecían haber pasado, unos días que transcurrieron en su mayoría en Cleveland. Y el guión no se cumplió, Sabathia lanzó como un maestro y Kluber encontró su kriptonita en Didi Gregorius, dos Home Runs en sus dos primeras apariciones en el plato, uno simple y otro impulsando carrera. 3-0 en la parte alta de la tercera entrada.
Y Sabathia empezó a sufrir en la quinta entrada, no la pudo terminar, entró Robertson para cerrar la brecha abierta en el marcador de los de Nueva York, concedieron dos carreras, pero siguieron por delante en el marcador, 3-2, y CC Sabathia celebrando el final de ese inning como un panameño celebrando el gol de su selección que les clasificaba para el Mundial.
Y los bullpen mantuvieron el resultado hasta la novena entrada, los Indians sacaron a Cody Allen, ya habían utilizado a Miller y Shaw, y no era el día para los de Cleveland, concedieron dos carreras más, para dejar un 5-2 que Chapman lo talló en granito, ese resultado no se movería. La gran sorpresa había llegado, los Indians, favoritos a llevarse el título de la MLB 2017, han sido eliminados.
Los Yankees pasaron, remontando un 2-0 ante el mejor equipo de la MLB, pero los Indians han hecho historia este año, sus 22 victorias siempre serán recordadas.