Hemos llegado aproximadamente al primer tercio de la temporada para todos los equipos. Así pues, es un buen momento para hacer un primer balance de la temporada para los Toronto Blue Jays.
El primer tema a comentar es el récord. El equipo ha ganado 12 partidos y ha perdido 11 después de terminar la serie con los Phillies. Ahora mismo el equipo está en tercera posición. Este balance está dentro de lo esperado.
De los partidos perdidos, solamente en uno la derrota ha sido por más de tres carreras al acabar las nueve entradas. Esto quiere decir que el equipo es competitivo y no le pierde la cara a los partidos. Este detalle es de suma importancia en un roster tan joven e inexperto. Al final los detalles han decantado la balanza en perjuicio de los Toronto Blue Jays en casi todos los partidos perdidos. La experiencia hará que en un futuro varios de estos partidos perdidos por la mínima se decanten a favor del equipo canadiense.
A nivel colectivo hay varios aspectos a reseñar.
Empecemos por la rotación de abridores. Aquí hay que destacar que la reconstrucción va a un ritmo más lento que el del lineup. Por lo tanto no se esperaba un rendimiento bueno de la rotación al inicio de temporada a pesar de haber incorporado a Hyun Jin Ryu. El pitcheo abridor en estos 23 partidos ha tenido un ERA de 4.93. Esto los sitúa aproximadamente en mitad de tabla. Este ERA es engañoso. Escudriñando en otro tipo de estadísticas podemos ver que el rendimiento ha sido peor. Tanto en WAR (aquí habría que excluir a los Cardinals por el escaso número de partidos jugados) como en FIP el equipo ha estado dentro de los cinco peores de la MLB. EL BABIP de 0.271 es bajo y explica buena parte de esta sensación engañosa. Los ratios de home runs y bases por bolas por cada nueve entradas tampoco son buenas (1.77 y 4.19 respectivamente). Los ratios de strikeouts por nueve entradas y groundballs son mejores pero no pasan de la mitad de tabla en toda la MLB. Con respecto a estos datos no hay que mostrar señales de alarma puesto que las muestras son escasas. Además esta temporada es muy complicada para los lanzadores, sobre todo si han cambiado de equipo o empiezan su carrera en MLB.
Continuemos ahora con el bullpen. El rendimiento de los relevistas en este tramo de temporada ha sido notablemente superior a lo esperado. Esto sorprende sobre todo después de la lesión de Giles. No obstante hay que coger esto con pinzas puesto que la muestra es muy corta. En ERA, WAR, FIP, HR/9 y K/9 el equipo canadiense está dentro de los cinco mejores de la MLB. El BABIP se sitúa en mitad de tabla (así que descartamos el factor «suerte»). El único lunar está en que los relevistas conceden un número de bases por bolas algo elevado. El Front Office lleva varios años seguidos sacando relevistas buenos a precios irrisorios en el mercado de trades y agencia libre. Parece que esta tendencia va a continuar.
Prosigamos ahora con el análisis de la ofensiva. El equipo lleva una media de 4.61 carreras por juego. Esto los sitúa aproximadamente en la mitad de tabla. Al principio de temporada se esperaba que la ofensiva estuviera mejor y fuera la protagonista en las victorias. No obstante en los últimos días parece que la tendencia está cambiando. En los 10 últimos partidos los Toronto Blue Jays están anotando una media de 6.7 carreras por partido. Algo tremendamente llamativo en el equipo es lo tremendamente agresivo que está siendo corriendo las bases en comparación con años anteriores. En casi todas las principales estadísticas el equipo está en la horquilla del 10 al 20 en toda la MLB. La única estadística llamativa es la de home runs, que está situado en sexta posición.
A nivel defensivo el equipo está aparentemente igual que en otras campañas por el momento. De todas formas es complicado evaluar el desempeño en este área puesto que las métricas defensivas no están tan avanzadas como en otras áreas. Además las métricas defensivas tienen un cierto componente subjetivo que es muy difícil de eliminar. Hay estadísticas como el DRS en los que el equipo está en el furgón de cola. En cambio en otras, como el UZR, el equipo está entre los mejores. En cuanto al número de errores por juego el equipo está sobre el puesto 20 en toda la MLB.
En el aspecto individual hay varios temas a comentar.
Bo Bichette poco a poco se está convirtiendo en uno de los mejores jugadores de las mayores. Es una pena su lesión contra los Rays. La lesión no es grave pero en una temporada tan corta cualquier contratiempo tiene una gran influencia. Al bate está dando un gran rendimiento. Está bateando con un buen promedio y con potencia (también hay que comentar que el BABIP es un poco alto). Al correr las bases está siendo agresivo y efectivo. En defensa está rindiendo a un nivel razonable en el campocorto. Esto último es muy importante porque había muchas dudas de que pudiera jugar en el SS en las mayores.
Hay que dedicar ahora un apartado a Vladimir Guerrero Jr. Echando un vistazo a sus estadísticas está claro que sus números están al bate están lejos de lo esperado para el otrora superprospect. Si ahondamos un poco más en sus estadísticas observamos que el porcentaje de bolas con contacto duro es bastante bueno. Además es uno de los peloteros que más bolas impacta con una velocidad de salida de más de 95 MPH. Así que la razón de su bajo porcentaje está en su bajo ángulo de salida de la bola y al elevado porcentaje de groundballs. Si mejora este aspecto de su juego, sus estadísticas al bateo subirán como la espuma. Por lo tanto, de momento, no hay motivo para alarmarse. No es el primer pelotero, ni será el último, que puliendo ligeramente su técnica de bateo mejora drásticamente su launch angle.
Cavan Biggio ha pasado bastante desapercibido en su paso por las menores en comparación con otros compañeros suyos. En el poco tiempo que lleva en las mayores está dando unas sensaciones muy buenas. Es un pelotero que está aportando en todas las facetas del juego. Sobre todo está destacando su control soberbio de la zona de strike y su polivalencia en el campo. Es también importante el equilibrio que aporta a la parte del lineup al ser un bateador zurdo.
Hyun Jin Ryu empezó con una buena salida ante los Rays, únicamente empañada por una mala entrada. Contra los Nationals tuvo una actuación bastante mala. En las tres siguientes salidas ha estado tremendamente sólido. En ninguna de sus salidas se ha ido más allá de las seis entradas ni ha ido más allá de los 100 lanzamientos. Está claro que se quiere cuidar el brazo del coreano. La sensación es que Ryu será un jugador bastante útil para los Toronto Blue Jays aunque no será la estrella que algunos esperaban.
Un punto de atención importante ha sido el estreno de Nate Pearson en las mayores. Su debut contra los Nationals ha sido bastante bueno. Las siguientes actuaciones han sido bastante peores. Ahora mismo está en la lista de lesionados. Está claro que no ha sido el inicio esperado. No obstante hay que tener paciencia. No siempre la adaptación a las mayores es inmediata. El mayor problema que ha tenido ha estado relacionados con la localización de sus lanzamientos. En principio debería ser un problema puntual si tenemos en cuenta su histórico en las menores.
Otras actuaciones a destacar en son las de Randal Grichuk y Teoscar Hernández. Ambos han tenido un inicio de temporada muy bueno al bate. Ambos peloteros están destacando por pegarle bastante duro a la pelota (sobre todo en el caso de Teoscar). El punto negativo en ambos casos son las altas tasas de strikeouts.
En la posición de receptor, Danny Jansen y Reese McGuire han empezado mal la temporada al bate. Detrás del plate no lo están haciendo mal pero tampoco son actuaciones destacadas. Es importante para el futuro de los Toronto Blue Jays que alguno de los dos se consiga asentar definitivamente en la posición a buen nivel.
En el bullpen es de reseñar la actuación de Jordan Romano. De él hay está destacando su capacidad para hacer strikeouts y generar groundballs. No es de descartar que se convierta en uno de los puntales en el bullpen del futuro de los Toronto Blue Jays.
En la rotación, el rendimiento de Chase Anderson y Tanner Roark están dentro de los esperado. La misión de ambos es la de acumular entradas para no sobrecargar los brazos más jóvenes. Shoemaker, en cambio, ha empezado algo peor de lo esperado. Este hecho tampoco es de extrañar habida cuenta de su periodo de inactividad por su grave lesión la temporada pasada.
Como resumen podemos decir que el inicio de temporada ha sido bueno en líneas generales. Es posible que si sigue esta actuación el Front Office sea activo en el final del periodo de traspasos para adquirir alguna pieza para intentar el acceso a postemporada. Podría darse el caso de que se repita el escenario del 2015. En ese año los Stroman, Pillar, Sánchez, etc. empezaron a emergen como jugadores importantes. A finales de ese periodo de traspaso el Front Office dio un golpe en la mesa con los trades por David Price y Troy Tulowitzki. A largo plazo estos trades no han sido buenos. No obstante a corto plazo el impacto de ambos trades fue fundamental.