Los Rays vieron la pasada madrugada como los fantasmas de la estadística se volvían en su contra y dejaban al descubierto que eran el peor equipo bateador (según la estadística) en llegar al clásico del otoño. La necesidad de ganar este segundo partido era acuciante para los Rays. Salieron a ganar un partido corrigiendo los errores de la noche anterior en solo 24 horas: reducir los ponches. También podría ser que Kershaw no estuviese… No, seguro que no es eso. También presenciamos la aparición de Joey Wendle como héroe inesperado de una cálida noche en Texas, pero lluviosa en mi (casi confinada) Granada natal
Con 11.388 confluyentes en las gradas del nuevo estadio de beisbol que se han montado los Rangers en Dallas, los Rays comenzaban la primera entrada igual que en el primer partido: dándole al bate, pero esta vez sí conseguían hacer daño gracias a un home run solitario de Brandon Lowe que volvía a aparecer al bate. Justo cuando Fernando Díaz decía que su equipo lo necesitaba. Ya sabes, la maldición del comentarista.
No solo empezaba enchufado Lowe, sino que su pitcher abridor de la velada, Blake Snell, dominó la primera entrada con dos K ante Betts y Turner. Esta tónica de dominación se iba a mantener durante 3 entradas y dos tercios que se vieron ensombrecidas por cuatro bases por bolas y un final precipitado del no-hitter que estaba completando Snell hasta ese punto.
Pitchers with 8+ strikeouts and no hits allowed through 4 innings of a World Series game:
Sandy Koufax (1963 Game 1)
Blake Snell (tonight)@RaysBaseball #RaysUp— Stats By STATS (@StatsBySTATS) October 22, 2020
Mientras su CY Young se encarga de hacer ponches, los bateadores estaban en la mejor forma posible. Los Rays conseguían hits, bases por bolas y corrían de manera eficiente las bases. No con ellos estuvo exento de piedras y errores el camino. En la segunda entrada Manuel Margot conseguía colocarse en tercera después de un fly de sacrificio de Wendle y de robar segunda durante el turno de su tercera base. Adames estaba preparado para hacer el sacrificio y aumentar la ventaja, pero Margot corre demasiado pronto las bases y es eliminado en home. Adames conseguía colocarse en primera, pero sería eliminado intentando robar segunda. Los Rays no terminaban de rematar y Dave Roberts seguía con el juego de las sillas en su bullpen intentando encontrar soluciones.
Parecía que una plácida tercera entrada de ambos equipos relajaba el partido. Tanto que en Movistar les dio tiempo a hablar de la película ’61’ y que Fernando Díaz abriera el melón del conocimiento perpetuo que posee. Los Rays estaban a otra cosa, no para ir al cine. «Que estamos en una pandemia, el béisbol es más seguro», dijo Kevin Cash. Y a jugar a la pelota se pusieron los Rays.
Arozarena se plantaba en primera con una base por bolas y cuando parecía que se venía el final de la entrada con una double play sencilla, Kike Hernández fallaba en la jugada, que eliminaba al cubano-mexicano en segunda, pero permitiría a Choi hacer historia: es el primer coreano en lograr un hit en unas WS. Kike Hernández pasaba de héroe a villano en un segundo. Un hit de Margot, complicaba las cosas a los Dodgers que cambiaban a Dustin May por Víctor González para remediar el entuerto. Sin embargo, Joey Wendle quería entrar en las WS por lo grande y con su doble impulsaba dos carreras que ponían el marcador en un 3-0 que parecía más abultado por sensaciones. Adames era eliminado por Muncy. Y se acabó el suplicio, por ahora.
Snell seguía a lo suyo en la cuarta, consiguiendo otra entrada limpia y dos Ks más a su casillero. 8 llevaba, ningún hit. Sus compañeros en la quinta aumentaban la ventaja a cinco carreras después de un HR de dos carreras que conseguía Brandon Lowe, impulsado a Meadows. Un HR que llegaba con dos outs para los Dodges. En los momentos donde se ganan los partidos.
Blake Snell, Disgusting 79mph Curveball. 🤮🦖 pic.twitter.com/nRx2a62jRn
— Rob Friedman (@PitchingNinja) October 22, 2020
En la misma quinta vimos el renacer de los Dodgers que, también con dos outs en contra, conseguían un HR de dos entradas después que Chris Taylor impulsara Kike Hernández después de un base por bolas. Dos HR en el partido que llegaron exactamente de la misma narrativa. Béisbol, señoras y señores. Llegaba el coco. Mookie forzaba una base por bolas y Seager conseguía un hit que colocaba a Betts en segunda. Venía el fantasma de la analítica para Snell, que estaba desquiciado con el umpire después de unas señalizaciones más que dudosas durante la entrada. Se acabó el día para Snell. Buen trabajo, chico, es hora de limitar daños. Nick Anderson conseguía el ponche en Turner y llegábamos a la mitad del partido.
La sexta entrada empezaba con Choi y Margot golpeando los lanzamientos de Joe Kelly. Con Choi en tercera base, Joey Wendle hacía su segundo fly de sacrificio para que el coreano anotase el 6-2. El partido se diluía. Un error de Muncy mandaba a Margot a segunda. Kelly, como dice la estadística de él, se creció en esta situación y sacó dos K a Adames y Kiermaier y daba el turno a sus bateadores. En esa sexta entrada Will Smith conseguía un solitario HR que le daba alas a los angelinos con el 6-3. El resto, fue una entrada fácil para Anderson.
Dave Roberts paraba la música otra vez. Joe Kelly se quedó de pie, era el momento de Alex Wood para limitar las entradas de los Rays. Se le complicó un poco la tarea Kelly después del hit de Yandy Díaz, que entraba en sustitución de Meadows. La eliminación de Lowe allanaba el camino, pero Roberts mandaba intencionalmente a base a Arozanera. Brosseau, que entró al partido por Choi, veía la K. Salvada la situación, otra vez más. Fairbanks entraba por los Rays y conseguía tres outs sencillos. Las posibilidades de los Dodgers se escapaban.
Ya en la octava se veía más sólido a Alex Wood, que conseguía dos outs rápidos y consiguió limitar el doble de Adames con un rolazo de Kiermaier. Era ahora o nunca para los Dodgers. Seager se puso el traje de carrito e impulsaba un HR y un doble de Turner daba esperanzas a los de Dave Roberts. Muncy era eliminado en un fly. Will Smith en un rolazo. Loup entraba al partido y mandaba a Bellinger al banquillo con un ponche antológico. Respira la bahía de Tampa.
La novena se presentaba como una oportunidad de aumentar la ventaja para los antiguos demonios de Florida, más con dos jugadores en base gracias a la base por bolas de Díaz y el hit de Arozanera. El problema: dos outs en contra. Supieron salir los Dodgers con un rolazo de Brosseau que les devolvía bola de partido. Loup seguía en la loma. 6 lanzamientos tuvo en la novena, 6 strikes. Dos eliminaciones a Ríos y Barnes dejaban la noche vista para la cama. Salía a cerrar Diego Castillo que con solo tres lanzamientos -y su posterior K- cerraba la noche y colocaba el 1-1 en la serie. Tendremos quinto, como mínimo.
Nick Anderson el hombre multiusos
Nick Anderson ha conseguido un save en esta postemporada y ha aparecido en todas las entradas desde la tercera a la novena al menos una vez. Un hito que comparte con los siguientes nombres:
- Nolan Ryan, 1969 Mets
- Don Gullett, 1970 Reds
- Ken Clay, 1978 Yankees
- Brad Peacock, 2017 Astros
- Nick Anderson, 2020 Rays
Fuente: STATS
