“el mundo se divide en dos categorías: los que tienen revólver cargado y los que cavan. Tú cavas”
Clint Eastwood en “El bueno, el feo y el malo” (1966).
2015/2016/2017/2018/2019/2020
tuvimos el revólver cargado: todos esos años dábamos miedo y llegamos a playoffs
2021-2022
…ahora nos toca cavar
RESUMEN
-No hay mucho que analizar: a mitad de temporada, somos un equipo horrible, con una marca de 32 ganados y 47 perdidos, a 11 juegos detrás de los dos equipo que ocupan el primer lugar de la División Central de la Liga Nacional, Brewers y Cards. Y lo que es todavía más duro para comprobar nuestra verdadera situación: estamos empatados con los Pirates, un equipo que por presupuesto y plantilla podría ser de triple A.
-Somos el típico equipo miserable, que encuentra siempre una forma distinta de perder. Solo un equipo así puede perder 10 partidos seguidos o tener una marca de 48-0 con corredores en posición de anotar, la peor racha sin hits en el baseball en más de 40 años.
–No es que haya sido una sorpresa o una gran desilusión este año, ya se temía algo así:
no te puede decepcionar alguien de quien no esperas nada (ahora entiendo perfectamente como se sienten mis padres).
-Durante los últimos años la ofensiva dependía excesivamente del poder, así que este año se intentó cambiarla por más contacto, pero una cosa es la teoría y otra la práctica, los jugadores no están logrando poner la pelota en movimiento, así que ahora no tenemos ni contacto…ni poder.
-Antes de empezar el año, lo único emocionante eran los fichajes de Suzuki y Stroman, y la llegada del Top Prospect Brennen Davies, pues bien, están todos lesionados…creo que al general manager se le debió de caer un espejo al tropezar con un gato negro mientras pasaba por debajo de una escalera, porque sino no me lo explico.
– No se equivoquen, me estoy quejando de este equipo, pero no lamento ser de los Cubs. Las cosas malas forman parte de la vida, y son justo las que luego darán sentido a las buenas, y la vida consiste en esto, ¿no? En saber disfrutar de todo, hasta de la temporada terrible de tu equipo.
Lo resume Woody Allen en la maravillosa Annie Hall (1977):
“Dos señoras mayores están en un Hotel de alta montaña, y dice una: “!vaya, aquí la comida es realmente terrible!”. Y la otra replica: “!Si, si!…y además dan unas raciones tan pequeñas”.
Pues básicamente es así como me parece la vida: llena de soledad, misterio, sufrimiento, tristeza…Ysin embargo se acaba demasiado deprisa.”
Pues eso, nos quejamos de todo, pero en realidad siempre queremos más.
EL EQUIPO
Dentro de la mediocridad de este año, se pueden sacar algunas cosas buenas:
CUADRO INTERIOR
–Patrick Wisdom: este año está siendo su confirmación después de que el año pasado superase el record de rookie con más homeruns en los Cubs. Es un jugador excesivo al bate, pocos jugadores se ponchan más que él en las mayores, pero si eres el pitcher que le lanza sabes que si le da a la bola, estás muerto: por ahora lleva 17 homeruns y 45 impulsadas. Se ha ganado un lugar en la tercera base no solo ahora, sino también cuando los Cubs sean realmente competitivos, porque además de estos números al bate ,es un excelente defensor en la esquina caliente (algo poco usual con estos jugadores de homerun o nada).
–Nico Hoerner: tras dos años llenos de lesiones, solo se dudaba de su durabilidad en el campo, pero este año que está sano, se está confirmando todo lo que se suponía de él: uno de los mejores defensores del equipo, tanto en el SS o en segunda, y al bate es un jugador de mucho contacto (.309)
JARDINES
-Ian Happ: tras la lesión de Suzuki, el único jardinero que está cumpliendo este año, el año pasado el ambidiestro empezó frío pero en la segunda mitad del año fue de los mejores bateando, y este año sigue en racha(.285/ 8HR/37RBI) .
BULLPEN
De lo poco que se puede elogiar en estos dos primeros años de Jed Hoyer, es que ha construido bullpens muy fiables con pocos recursos. Este año son líder de las mayores en strikeouts.
ROBOS DE BASE
-Como nos cuesta tanto conseguir poner un hombre en base, Ross está siendo agresivo en este tema: somos quintos en las mayores en bases robadas.
MVP: WILLSON CONTRERAS
Cuando llegó al equipo en 2016 era Ringo, el último en llegar a una banda repleta de estrellas, era la última pieza que faltaba para hacer a ese equipo campeón.
Ahora que se han ido todos es Paul Weller en The Jam, mirando alrededor y pensando: ¿qué hago yo aquí rodeado de esta gente sin talento?
Está siendo el mejor catcher de las Mayores (.280,13 HR, 35 RBI) , acaba de conseguir su hit 600, y sin una oferta de renovación encima de la mesa, está claro que lo canjearán a mitad de año, seguramente conseguirán algún prospect muy valioso, pero ¿quien quiere un boleto de lotería que te puede salir bien o mal?, yo prefiero que se quede Ringo a recomponer la banda.
CY YOUNG: DESIERTO
En la temporada tan mala de nuestros pitchers está la clave de este año tan desastroso. Sobre todo en un deporte en el que si lanzas bien, el otro equipo ni juega.
Kyle Hendricks, uno de los mejores lanzadores en la historia de los Cubs, llevaba un par de años horribles, pues este año está siendo todavía peor, esta bajada de rendimiento suele ser normal con los pitchers al llegar a una edad, pero en Kyle es extraño, ya que nunca basó su eficiencia en la velocidad, sino en el control.
Marcus Stroman, Wade Miley y Drew Smily, que iban a ser la base de la rotación, pitchers veteranos que pueden comerse sin problemas muchas entradas en cada partido, están los tres lesionados.
Así que sólo nos quedan los pitchers novatos, combinando partidos increibles con desastrosos, con la incosistencia típica de su edad, a ellos no se les puede cargar con tanta responsabilidad ni culpar de nada.
LA SORPRESA: CHRISTOPHER MOREL
El año pasado, hubo algunas buenas noticias, pero ninguna llegó de los fichajes, fueron sorpresas inesperadas que llegaron de las menores, sin mucho nombre, pero que cumplieron con creces, como Frank Schwindel, Rafael Ortega y sobre todo, Patrick Wisdom.
Este año la historia se repite, ningún fichaje ha funcionado, y el jugador más emocionante por ahora ha sido un prospect de 22 años, Christopher Morel, que en principio no estaba ni entre los destacados de sus categorías inferiores…pero esto es baseball!.
Tiene todo lo que le falta a los Cubs este año: es un jugador excitante y descarado, que en su primer at bat en las Mayores hace esto:
Es también espectacular y polivalente en defensa, puede jugar en 2ª, en 3ª y ahora está jugando en el jardín central. Suele batear justo antes de Contreras, amigo y mentor suyo y juntos están siendo la pareja más letal en ataque.
En 43 juegos lleva 8 jonrones y 23 remolcadas, y la semana pasada consiguió ser uno de los pocos rookies de los cubs con 5 hits en un solo partido.
LA DECEPCIÓN:
Si la categoría de “mejor lanzador” estaba desierta, en esta categoría hay más gente que en los Sanfermines. Podría poner a media plantilla pero nombraré solo a tres:
-Nick Madrigal: un bateador de muchísimo contacto, no con mucho poder, pero siempre por encima de los .300, pues este año está en .222. Solo en los Cubs puede suceder que un Ted Williams se acabe convirtiendo en Mario Mendoza.
-Andrelton Simmons: tiene un buen guante en defensa, pero un desesperante .188 al bate, creo sinceramente que si ponen a mi hija de 6 años batearía más.
Jonathan Villar: vino de los Mets destacando en ataque y en defensa, y, adivinen…horrible en ataque y espantoso en defensa.
Expectativas ante el cierre de mercado veraniego y pronóstico final de temporada:
Tras este total desastre, volveremos a ser un equipo vendedor.
Casi seguro que se irán los que terminan contrato este año, Contreras y David Robertson, que está haciendo un excelente papel de closer.
Jed Hoyer siempre ha insistido en que no se hará una reconstrucción larga y se buscará competir desde ya. La clave para saber si piensa esto de verdad o es sólo palabrería será si salen jugadores como Stroman o a Happ, porque ellos tienen más años de contrato, y si el año que viene se piensa competir, ¿porqué venderlos?
¿Y con que nos podemos ilusionar en el resto de temporada?
1-disfrutar de ver algunos prospects , ahora es el mejor momento para probarlos, sin ninguna presión por la clasificación, a ver si aparece otro Wisdom o Morel.
2- tras su larga lesión, por fin vuelve Suzuki, la única esperanza ahora mismo, así que toca gozar viéndolo batear, y fantasear con lo que nos puede dar los próximos años. Ya saben, soñar es gratis.
En resumen, otro año perdido, y ya es el segundo. En Chicago ya hay ganas de dejar de cavar y volver a desenfundar la pistola.