Desde el próximo 12 de junio y hasta el 14 posterior tendrá lugar, en Seacacus (New Jersey) el Draft de la MLB, 4 días para 40 rondas enteras: aunque sea el veterano, es sin duda alguna un draft mucho menos seguido tanto a este como al otro lado del Atlántico que sus homónimos en NBA, NHL y NFL, con dos rondas el primero y siete segundo y tercero, y es que la relevancia de las elecciones en las grandes ligas es mucho menor.
De hecho, el camino de un jugador, por pronta que sea su elección, no tiene como siguiente estación las Grandes Ligas, sino que aún ha de recorrer un más o menos largo, según los casos, camino a través de las Ligas Menores. Si nos fijamos en las 10 primeras elecciones del Draft en los últimos 5 años podremos comprobar, que ninguno de los elegidos en 2016 ha llegado aún a MLB, y en los años
anteriores han sido 5 en el 2015, 4 en el 2014, y 2 en el 2013.
anteriores han sido 5 en el 2015, 4 en el 2014, y 2 en el 2013.
Y en contraposición, jugadores que fueron elegidos en las últimas rondas se constituyeron en grandes jugadores e incluso leyendas, así: Mike Piazza fue la elección 1390, Andy Petitte la
594 y Albert Pujols, la 402.
594 y Albert Pujols, la 402.
Es tan poco relevante el presente el Draft, que se celebra mientras la competición universitaria y las grandes ligas se encuentran en pleno desarrollo, y en el caso de la NCAA ya en su tramo decisivo, acudiendo las franquicias en busca de talento y no de atender a sus necesidades inmediatas.
Su ámbito no es mundial, sino que simplemente extiende su jurisdicción a Estados Unidos, Canadá y Puerto Rico, para muchos (entre ellos quien esto escribe) la expansión del Draft a Puerto Rico trajo consigo la pertinaz crisis del béisbol boricua, así como también para muchos (entre ellos quien esto escribe) es la causa del de que el delirante descontrol de la contratación de jugadores cubanos por las mayores esté institucionalizado con nulas posibilidades de cambio.
Y sin duda alguna el Draft de la MLB es el menos glamuroso de los Drafts de las grandes ligas.
Los chavales que juegan a béisbol en la Universidad o en el Instituto, son chicos normales, con vidas normales haciendo cosas normales. Su fama solo se extiende a su Universidad y alrededores beisbolísticos, a diferencia de los jugadores universitarios de las primeras rondas del Draft que llegan a NBA o NFL, ya constituidos en figuras y famosos, ante el muy superior eco del baloncesto y el fútbol universitarios tanto en los USA como en el resto del mundo.
Además, jugar a béisbol requiere mucha más capacidad de análisis y concentración que cualquier otro de los grandes deportes americanos, ser especialista en poner el dedo para que no se caiga un el oval mientras otro lo patea puede serlo cualquier raza de animal con dedos, patas o garras. Así mismo, para nuestro deporte valen casi todos los físicos, cosa que no ocurre en el resto de grandes. Ello lleva consigo que ya desde el instituto los chavales que se ven atraídos por este deporte son los más estudiosos e inteligentes, y menos dados a la violencia, o a las fiestas con descerebrados/as, música ridícula e imaginativas bebidas.
Así, los incidentes, violencias, y ruinas entre los jugadores de béisbol que han completado el sistema educativo son mucho menores que en el caso de NFL o NBA, lo más grave entre ellos en los últimos tiempos debe ser la patética imagen del Caballero Oscuro en la barra de un bar bebiendo para olvidar que su exnovia estaba con otro y llegando tarde a su compromiso con su equipo, lo cual más que reprobación genera lástima.
Por ello, en nuestro draft no encontraremos: grandes teatros, draft parties por todo USA, tipos con trajes tan caros como extravagantes, y/o cadenas y anillos de oro, fanfarroneando sobre lo importantes y decisivos que van a resultar en la NFL o la NBA, junto a sus mastodónticas y pobladas familias o llorando por la abuela que los crio junto a sus cuatro hermanos mientras sus padres se ponían hasta las cejas de crack, heroína o cualquier droga sintética.
El orden de elección es el inverso a la clasificación de la temporada anterior en la fase regular de las
grandes ligas, aquí no hay sorteo alguno, la propia incidencia del draft y de la naturaleza del juego; y que se trate de una inversión a largo plazo hace absurdo y dificultoso que un equipo busque derrotas para asegurarse una mejor posición de elección.
grandes ligas, aquí no hay sorteo alguno, la propia incidencia del draft y de la naturaleza del juego; y que se trate de una inversión a largo plazo hace absurdo y dificultoso que un equipo busque derrotas para asegurarse una mejor posición de elección.
Este orden se ve modificado de diversos modos
:
- Equipos que perdieron agentes libres, sustituyen a aquellos que se los agenciaron, en la primera ronda.
- Existen elecciones extra, en primera y segunda ronda, para equipos con mercados pequeños y menos ingresos
- Equipos que se quedaron sin poder alcanzar contratos con jugadores elegidos en la edición anterior, poseen una elección extra, este año Pittsburgh por Nick Lodolo, su elección 41 del Draft del 2016.
- San Luis que en primera ronda pierde su elección a favor de los Cubs por la contratación de Dexter Fowler, en segunda ronda y en la segunda ronda compensatoria se queda sin elección, en ambos casos, a favor de los Astros, por su hackeo, con lo que los reyes de la granja elegirán por primera vez en el puesto 94.
- De la ronda 3 a 40 será el orden de clasificación de la fase regular.
Difícil es determinar si los Hunter Greene, Brendan McKay, Mackenzie Gore, Royce Lewis, Austin Beck, Kyle Wright o Jeren Kendall que acaparan, entre otros, los pronósticos para constituirse en las primeras elecciones del draft lo serán, pero es algo de lo que trataremos la próxima semana.
A continuación, os dejo unos vídeos de rápido visionado de los últimos Drafts de NFL, NBA y MLB para que comparéis vosotros mismos.
NFL: no nos deja insertar el vídeo, así que para verlo podéis pinchar en El Draft de la NFL.
NBA
MLB
Así pues, solo me queda aconsejaros que sigáis el Draft para aprender y mucho del béisbol universitario pero no sobre la MLB, aunque de esto último ya sabéis todos demasiado.