En la vida, como en el deporte, existen ciertos momentos que lo cambian todo, donde cualquier cosa es posible y lo improbable se convierte en real. El momento donde tu vida elige un camino que te llevará al futuro que es hoy, esa noche que saliste o te quedaste en casa, ese trabajo que cogiste o que dejaste volar, ese viaje que fue el mejor de tu vida o esa oferta que rechazaste porque no te parecía lo suficientemente atractiva, ese… Y de esos momentos se crea la realidad. El momento que hace que seas lo que eres. el momento que hace que seamos lo que somos.
Ayer vivimos uno de esos momentos en la MLB. Séptima entrada, San Diego Padres ante Los Ángeles Dodgers, un corredor en segunda base, dos eliminados y perdiendo los angelinos por una carrera. Lanzando está Brusdar Graterol -23.1 innings lanzados esta temporada, 13 strikeouts, con un ERA de 3.09, uno de esos pitchers que hacen sufrir, sólo 13 eliminados por Strikeout de 88 bateadores a los que se había enfrentado sólo 13 habían recibido un strikeout, y lanzaba ante Fernando Tatis Jr., 17 Home Runs con un OPS de .937 durante estos dos meses y medio de temporada regular. El estilo de Graterol, del que parece que pasaba por ahí, y le hacen pitchear porque nadie más que está en la calle quiere hacerlo, sin aspavientos, como si fuera un oficinista del montículo, lanza la bola. Tatis la conecta, se oye el sonido, el que normalmente precede a un Home Run, la bola vuela, Cody Bellinger -uno de los mejores defensores de la liga, el tercero en Carreras salvadas según StatCast, tras Jackie Bradley Jr. y Luis Robert– corre mientras mira la bola, se va acercando a la valla, la bola baja pero la valla se acerca al jugador en movimiento, cuando llega a esta salta y coge la bola. Catch, el gran catch. Los Dodgers mantienen la ventaja ante uno de los mejores jugadores del planeta que había conectado un gran batazo.
Y aquí termina el partido, no por entradas que quedan, no, por la sensación que queda en el aire de que si esto es posible no es posible perder. Y los Padres están cerca de remontar un 6-3 en la última entrada, consiguen 2 carreras más, pero todo estaba escrito. Después de la atrapada de Bellinger ya nada más era posible.
Precioso el partido de ayer entre Astros y Athletics, iban 2-0 para los de Houston, y se jugó este partidazo. Os dejo el resumen pero no os digo el resultado, vale el tiempo invertido en verlo.
Y la historia de los Marlins parece que va llegando a su fin, nueva derrota ante los Braves, que son mejor equipo. Unos meses brutales de los Marlins, que veía como un equipo que andaría por las cloacas de la clasificación durante años, pero me he equivocado, veo que Jeter sabe más que yo de esto, y me alegro mucho.
Y la crónica del partido de la victoría de los Rays ante los Yankees, la tenéis en este brillante artículo de Javier Cía, “Los Rays a un triunfo de la final de la Liga Americana“.