Hablamos hace pocos días del negocio del deporte infantil, pero hoy hablaremos de la profesionalización de béisbol infantil en los Estados Unidos. No es un algo que encontraremos en nuestro país con el béisbol -aquí tenemos este problema en los clubes de fútbol para niños-.
En España los clubes de béisbol tienen sus escuelas, donde se forman a los niños como jugadores y como personas, se busca compartir un deporte no muy seguido aquí pero con unas características que lo hacen único, es un juego que sabe mezclar tanto el espíritu de equipo como el individual. Todos los jugadores tienen su oportunidad de batear, en el cajón están solos, tanto los mejores como los que no son tan buenos. Todos tienen la oportunidad de batear. A la hora de defender todo el equipo ocupa el diamante, y la bola es caprichosa y va donde va, y cada jugador tendrá la oportunidad de hacer alguna jugada defensiva. Un deporte perfecto para conocerse y conocer a tus compañeros.
Y si te animas a que tu hijo pruebe el béisbol aquí está el listado de clubes de la RFEBS, aunque no están todos, falta alguno, como el Piratas Valencia.
El deporte escolar en USA, un auténtico negocio
Vivo en Boston y quiero que mi hijo juegue al béisbol, lo veo jugar con los niños y me doy cuenta que es el mejor de su clase, todo los conocidos me dicen que es un fenómeno, el próximo Mike Trout, así que decido tomarme en serio la vida deportiva de mi hijo, puede llegar a la MLB, todos los que le ven jugar me lo han dicho, hasta un scout retirado que vive en mi barrio le ve madera de crack mundial. Primero preparemos la cartera, esto son los gastos que vienen con el chiquillo. (Los datos son del artículo “How Kids’ Sports Became a $15 Billion Industry” de la Revista “Time“). Hablamos de niños que van por todo el país, jugando torneos y buscando al scout/representante que les consiga el primer contrato, no hablamos del niño que juega en el equipo de su escuela, esos niños no tienen que ver nada con todo esto.
Material
–Bate de metal: 300 $ (los de madera se rompen con frecuencia)
–Bolsa para llevar el material: 70$
–Guantes para batear: 30$
–Zapatillas: 90$
–Gafas de sol: 100$
–Casco: 60$
–Protector del codo: 40$
–Guante: 250 $
Total en Material: 940$
Competición y Equipo
–Jugar un torneo, 100$, juegan unos 10 al año: 1.000$
–Árbitros: 10$ por partido, unos 5 partidos por torneo, 50 partidos: 500$
–Entrenador del equipo: 50$ por semana, unas 44 semanas: 2.200$
–Uniforme: 200$
–Gasolina para desplazamientos: 600$
–Hoteles: 100$ cada noche, unas 20 noches, 2 por torneo: 2.000$
–Un campus de béisbol durante una semana: 400$
–Alquilar una caja de bateo: 40$ la hora
–Entrenador personal: 100$ la hora.
6500$ es lo que nos costaría de base este apartado, por lo que hablaríamos de un gasto de unos 7.440$ fijos, y aquí podemos sumar los campus que queramos, alquileres de cajas de bateo y entrenadores personales. Sin temor a equivocarnos estaríamos hablando de unos 10.000$ anuales. Pongamos que el niño ha empezado con 7 años y está hasta los 18 -antes de entrar en un equipo universitario-, serían 11 años, 110.000 euros invertidos en tu hijo.
Las familias han pasado de gastar 8.000 millones de dólares en actividades deportivas de sus hijos en 2005 a 15.000 millones en 2016, y creciendo.
Pongamos que todo va bien para ese niño -que no siempre es así, ni mucho menos-, ha estado jugando, entrenando y viajando por el país mientras sus amigos están en cumpleaños, fiestas de adolescentes, jugando a la Play… Y es escogido por una Universidad, entra becado y su familia se ahorra los 50.000$ que puede llegar a costar un curso lectivo. A la larga parece un buen negocio, si estudia 3 años la familia ha ganado unos 40.000$ -110.000$ invertidos y 150.000$ que costaría su carrera Universitaria-. Si el chico estudia y juega al béisbol, se saca una buena carrera y tiene conocimientos no sería una mala inversión económica, aunque sabemos que muchos deportistas aprueban sus carreras por sus méritos en el diamante y no en las aulas. Y aquí pueden llegar diversas opciones:
–El chico no es drafteado, pero ha estudiado, tiene su carrera universitaria con una beca deportiva y puede salir al mundo laboral. Parece un buen negocio si después consigue un buen trabajo.
–No es drafteado y no ha aprendido nada en la Universidad... Pues tiene muchos números de salir en Tele 5.
–Es drafteado y pasa a las menores sin llegar a la MLB, la mayoría. Pero la vida en las Minor League no es nada fácil, y muy mal compensada económicamente.
–Ser drafteado y llegar a la MLB, una gran minoría, podríamos hablar de unos 40 jugadores por cada año lectivo, y debemos pensar que unos 120.000 niños juegan a béisbol por cada curso en la High School, uno de cada 3000 niños llega a la MLB, y los que llegan no son esos que parecían buenos y hacían un buen partido, no. Llegan esos chicos que son mucho mejor que el resto, que se ve una gran diferencia entre él y el resto de niños que juegan contra él, y que ha mantenido una actitud constante, y no se ha pasado a los bares y las mujeres a los 16 años. Por mucho que metas dinero en un niño, las personas cambiamos, y muchas veces nos atraen otros caminos y no para el que nos quieren programar nuestros progenitores.
La inversión en el béisbol infantil parece un camino sin retorno. Este es sólo el principio de un mundo que mueve miles de millones de dólares. Sólo la cabeza de los padres puede sacarnos de este negocio donde la moneda de cambio es la infancia de nuestros hijos.